La Hortiña da Praza es un proyecto impulsado por el Concello de Lalín como complemento para las economías de agricultores y ganaderos del municipio que, de esta forma pueden comercializar en la Praza de Abastos, sus excedentes del campo. La iniciativa cumplió ayer un año con la satisfacción de los productores que diariamente exponen hortalizas y otros alimentos como leche ecológica, quesos e incluso pan para una clientela que desea alimentos de primera calidad.

Con el paso de los meses los usuarios conocen cada vez más la oferta de los seis productores lalinenses, que ofertan alimentos de temporada de huerta, también a restauradores del municipio. Estrella Quinteiro, una de las vendedoras de A Hortiña da Praza, precisa que inicialmente el público pensó que los productos se compraban en otras zonas para luego ser comercializados, aunque insiste que todos ellos son cultivados en distintas propiedades del término municipal. En su caso, cuenta con plantaciones de puerro, coliflor o guisante en fincas de la parroquia de Val do Carrio. "Quizá haya gente que todavía no nos conozca, pero valoramos bien esta iniciativa y creemos que debe ir a más", significa Quinteiro, quien señala que en la última feria del año de ayer en Lalín en sus puestos de productos ecológicos se agotaron existencias de coles o repollos. "No es nada extraordinario, pero nos da para sacarnos un sueldo", comenta. La facturación de los puestos de hortalizas y otros alimentos de temporada que se comercializan en la plaza ronda los 150 euros diarios.

Por otro lado, la concejala de Comercio de Lalín, María José Batán, afirma que la Hortiña da Praza se consolidó "con las expectativas y objetivos marcados desde su inicio: valorización y comercialización de excedentes de producción agropecuaria, acercar al consumidor este tipo de productos en las mejores condiciones de calidad y primar la atención al cliente". Batán recuerda que durante el último año se acometió una reforma del recinto de abastos y considera que A Hortiña da Praza debe ampliar a medio plazo su clientela e intentar captar a compradores más jóvenes.

Si en el ámbito zonal la venta de alimentos ecológicos está siendo bien valorada, los productores señalan que la venta de los productos en espacios como Mercamadrid no se ha concretado todavía y todo apunta que, por ahora, quedará en suspenso.