La escritora y periodista de origen cubano Anisia Miranda Fernández alleció ayer en su vivienda de Gres (Vila de Cruces), tras sufrir un derrame cerebral. La cónyuge del también literato Xosé Neira Vilas es velada en el salín de actos de la Fundacuín Neira Vilas y será enterrada hoy en el cementerio de la parroquia cruceña, tras una ceremonia religiosa que tendrá lugar a mediodía y en la más estricta intimidad, por expreso deseo de la familia. De hecho, al funeral no acudirá ningún representante de la Real Academia Galega, de la que el autor de “Memorias dun neno labrego” es miembro numerario desde noviembre de 2001.

El fallecimiento de Miranda causa una gran conmoción en la escena de la literatura de Galicia, en especial de la infantil. Desde la creación de dicha fundación, Anisia Miranda se ocupó de catalogar los fondos infantiles de la biblioteca así como de poner en marcha un sistema de préstamo a domicilio. El óbito de la escritora empaña, por otra parte, un prolífico año de reconocimientos y premios para Xosé Neira Vilas, que precisamente ayer tendría que desplazarse al Pazo de Congresos e Exposicións de Santiago para recoger un galardón que finalmente fue recogido por su sobrino. Hace apenas un mes, la pareja acudía a A Estrada para aceptar el premio periodístico Reimóndez Portela, y el día 29 de septiembre presentaba en el museo de Lalín la obra “Encontros con Laxeiro”.

Aunque su figura literaria aparece siempre ligada a la de su cónyuge, Anisia Miranda tiene una amplia trayectoria literaria. Hija de emigrantes ourensanos, nació el 30 de diciembre de 1932 en la ciudad cubana de Ciego de Ávila, aunque a los nueve años la familia emigra a La Habana para que la joven pudiese terminar la formación primaria y, más tarde, Magisterio y Periodismo. Con 12 años, publica su primer trabajo en prensa, y poco después escribe un cuento para niños. En 1953 se traslada con sus padres a Buenos Aires y un año después conoce al que, en 1957, se convertiría en su marido. Ese mismo año, Miranda y Neira Vilas fundan la editorial Follas Novas, que se encargaría de difundir el libro gallego por América y que en 1960 edita el primer libro de ella, el poemario “Esta es Cuba, hermano”.

Vietnam

La pareja regresa a la isla caribeña en 1961, donde permanecerán 31 años y donde Miranda trabajará en el periódico Pueblo y Cultura así como en las revistas infantiles Pionero, Zunzún y Bijirita. También en Cuba recibió varios premios por su obra teatral, además de la medalla Ho Chi Minh por sus trabajos de solidaridad con Vietnam. Muchas de sus creaciones literarias están traducidas al eslovaco, mientras que como traductora se encargó de trasladar al gallego obras del autor norteamericano Walt Whitman así como de los latinos José Martí, Rubén Darío o Amado Nervo.

Desde 1992 el matrimonio residía en la patria natal de Neira Vilas, donde Anisia Miranda cultivó “un grande amor polos nenos, pese a non ter fillos, e unha imaxe de fidelidade ás súas ideas e ás súas persoas”, según el secretario de la fundación, Lois Reimóndez.