La alcaldesa de Silleda, Paula Fernández Pena, propone ampliar hasta 2031 el contrato a la concesionaria del servicio de aguas para conseguir una rebaja en las tarifas y propone este acuerdo "ao goberno entrante", por considerarlo muy ventajoso para los ciudadanos. Pena explicó los términos del preacuerdo con la firma Espina y Delfín, que consisten en la supresión de la facturación de los metros cúbicos depurados y facturados, cambiando un modelo de con mínimos a otro de sin mínimos de consumo; la eliminación de la fórmula polinómica por subidas anuales en función del IPC y la consecución de un nuevo descuento que, como se había planteado en ocasiones anteriores, oscila entre el 21 y el 36,1%.
El cumplimiento de este preacuerdo conlleva prorrogar la concesión hasta 2031. En este caso, el coste del servicio de abastecimiento sería de 0,51 euros por metro cúbico de agua y de 0,50 en 2031; calculando siempre un incremento anual del 2% del IPC. Asimismo, la tasas de alcantarillado y depuración mantendría un coste prácticamente idéntico en 2016 que dentro de 22 años, teniendo en cuenta que la aplicación del descuento pactado será como mínimo del 21%, y que se iría incrementando cada año hasta dejar la facturación en los mismos valores que a día de hoy.
La ampliación del contrato en 15 años a la concesionaria no consigue una reducción inmediata de las elevadas tarifas que soportan los ciudadanos desde hace años, aunque las condiciones económicas actuales serían incluso sensiblemente más bajas "ás que poderiamos ter en 2031, xusto ao remate da concesión", precisa Pena. En el acuerdo inicial con la empresa también se contempla la compensación del servicio de 2008, por un importe de más de 15.000 euros, que corresponde a la limpieza de cuatro fosas sépticas entre los años 2003 y 2007.
La mandataria recordó asimismo que, fruto de sus negociaciones con Espina y Delfín, se consiguió paralizar la subida del recibo del agua durante los dos últimos años "aínda que non existira ningún acordo pechado en firma coa empresa". "Isto é asumible, pero correspóndelle ao novo goberno valorar a situación e buscar solucións para que os silledenses non padezan un incremento no recibo, xa que nós non descartamos que haxa outras posibilidades". Y pidió al nuevo ejecutivo local que mantenga la convocatoria de la Mesa da Agua para consensuar las iniciativas sobre este asunto, como hizo su grupo.
Deudas con la firma
Pero la mandataria no obvió que el nuevo gobierno deberá buscar una solución para la deuda acumulada por Espina y Delfín, a la que el concello adeuda casi 77.000 euros en facturas entre los años 1996 y 2006. Además, dijo que de éstas, sólo están reconocidas y pendientes de pago poco más de 5.500 euros. Cabe destacar entre las facturas, las correspondientes a las liquidaciones de 1999 y 2000 "que foron asumidas polo goberno xusto antes de procesos electorais" y que se elevan a casi 40.000 euros. Asimismo, están pendientes de pago unos 12.000 euros, que el concello debe desde 13 años, para pagar el campeonato de España de trial que se disputó en Silleda en 1995. Y también están sin abonar facturas del consumo de agua del colegio María Inmaculada o del cementerio municipal.
A estas cantidades hay que sumar las liquidaciones del primer y segundo trimestre de este año, que suman 8.074 y 8.615 euros respectivamente.
