El concejal de Facenda de Lalín, Manolo Gómez, anunció ayer que los presupuestos de 2010 contendrán una congelación total de los tributos municipales con la excepción del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que se rebajará una centésima hasta 0,44 para amortiguar y suavizar la subida habitual de Catastro, y de la instalación de puestos de feria, que pasarán a cotizar 1,3 euros por metro, tal y como se acordara entre concellos y vendedores ambulantes tras una polémica anterior por las tasas.

De este modo, Gómez dejó claro que los impuestos locales quedarán exactamente igual, ya que no se tienen que incrementar al ser el IPC del presente ejercicio negativo en un 1%. Asimismo, también descartó que se vaya a producir una rebaja en este parámetro en ningún tributo pese a que el BNG demandó la reducción de la tarifa en el caso del agua y el alcantarillado al existir inflación negativa. Los nacionalistas alegan que, del mismo modo que se sube un impuesto cuando sube el IPC, debe bajarse cuando extraordinariamente sucede lo contrario, pero el Concello de Lalín va a hacer caso omiso e impondrá una congelación generalizada.

En todo caso, el edil de Facenda admitió que el Concello ya está pagando menos a las empresas concesionarias de los servicios municipales, pero que ello no beneficiará a los contribuyentes que seguirán abonando las mismas cantidades. Así, Gómez indicó que se ha reducido en casi 3.000 euros mensuales el canon a Sufi por el servicio de limpieza y basura a causa de la inflación negativa. La empresa percibía 77.598 euros al mes del concello y ahora sólo dispone de 74.804. Aun así, Gómez señaló que no se puede bajar el impuesto, ya que el servicio sigue siendo deficitario para las arcas municipales entre 300.000 y 360.000 euros anuales. “Non se pode baixar porque aínda así xa incumprimos a lei, que di que os servizos non poden ser deficitarios e teñen que cubrirse coa recadación das taxas”, dijo.

En cuanto al agua y alcantarillado, la tasa se mantendrá igual que en 2009, pero el concello pidió informes a sus servicios técnicos para ver si puede rebajar el canon por la inflación negativa, aunque en este caso el pliego no se refiere al IPC y la firma Espina hace trabajos a mayores, como el traslado de lodos a un gestor autorizado, que son valorados de modo positivo.

Pendientes del cobro de la tasa de telefonía móvil

El concejal de Facenda de Lalín, Manolo Gómez, anunció que el Concello reiterará en 2010 por segundo año consecutivo la ordenanza por la ocupación del espacio aéreo del municipio con la que se pretende gravar a las operadoras de telefonía móvil. El edil indicó que el padrón del presente año, elaborado como otros ayuntamientos según la facturación y que ascendía a 86.000 euros, aún está pendiente de cobro. El motivo es el recurso judicial que han presentado la compañía a los reveses que están obteniendo en los tribunales. Esta situación les está permitiendo aplazar el pago, pero si hay un fallo definitivo en contra tendrán que abonar el importe desde el ejercicio en que estuviera aprobada la ordenanza, en el caso de Lalín el presente año 2009.

En cuanto a la recaudación de la ordenanza por móviles para 2010, Gómez indicó que se desconoce, ya que dependerá de los datos de facturación anual de las empresas con sus clientes lalinenses, aunque vaticinó que será muy parecida a la de 2009, que ascendió a 86.000 euros.

Finalmente, el edil indicó que los presupuestos aún no están perfilados por el cambio de estructura, pero se mostró convencido de que “será difícil” alcanzar los 15,5 millones de este año.

Manolo Gómez indicó que el Concello contendrá la política fiscal

Nuevas ordenanzas para que se tribute por las bodas civiles y por la colocación de cajeros

El Concello de Lalín prepara dos nuevas ordenanzas fiscales para el próximo año, que se unirán a la treintena que tiene actualmente en vigor. Eso sí, ninguna de ellas afecta a la universalidad de la población lalinense y de hecho son bastante concretas, ya que pretenden gravar la ocupación de la vía pública por la instalación de los cajeros automáticos de las entidades financieras y las bodas civiles que se ofician en el ayuntamiento. El concejal de Facenda, Manolo Gómez, indicó que por el momento se desconocen las cantidades exactas que se cobrarán por estas dos cuestiones, aunque añadió que no serán recaudaciones importantes para las arcas municipales. En todo caso, el concello lalinense está analizando ordenanzas similares ya aprobadas en otros municipios, por lo que los importes serán muy parecidos.

En el caso de las bodas, se pretende instaurar una tasa, similar a la de concellos vecinos como A Estrada, para sufragar los costes y en el caso de los cajeros se pretende seguir con la política iniciada tímidamente hace años de arañar en el bolsillo de las grandes empresas y las multinacionales. En este contexto, se sitúa la reclamación del IBI especial para las firmas de la autopista y los eólicos o la tasa de las operadores de móviles por utilizar el espacio aéreo público del concello.

Finalmente, el concejal dejó abierta la posibilidad de que aún se incorpore alguna ordenanza nueva más.