El juicio de faltas a dos miembros del colectivo independentista Ceivar celebrado ayer en Lalín movilizó a buena parte de los guardias civiles de la comarca. Desde primera hora, una decena de agentes se desplegaron por las inmediaciones de la sede de los juzgados en previsión de una posible concentración de solidaridad con los encausados por parte de sus compañeros de formación. Sin embargo, sólo dos de los tres citados por el juez acudieron a la cita. Se trata de la pareja compuesta por M.R.L., una joven de 21 años vecina de Boiro, y H.M., de 23 años y natural de Lugo. El tercer imputado, A.Q., vecino de Ames, no hizo acto de presencia en el edificio judicial por razones que se desconocen.
Los hechos juzgados ayer en Lalín se remontan al pasado mes de octubre cuando los tres jóvenes se encontraban en Silleda colocando carteles de apoyo a los militantes independentistas Xiana Gómez, Uxío Caamaño y María Bagaría, juzgados en la Audiencia Nacional. Varios agentes de la Guardia Civil, de paisano, protagonizaron un incidente con los mozos que provocó su posterior detención provisional. Los activistas de Ceivar están acusados de daños contra la propiedad por la pegada de carteles y las pintadas y desobediencia a la autoridad, así como, salvo la mujer, de actitud despectiva con los números de la Benémerita.
