El portavoz del BNG cruceño, Xoán Blanco, denuncia el mal funcionamiento del depósito de aguas residuales de Brandomés que, a su juicio, está provocando que el agua procedente de las viviendas se derrame por las fincas provocando un notable daño medioambiental en este entorno. El edil precisa que esta infraestructura, que almacena el agua residual aunque no completa el proceso de depuración, no funciona debido a los problemas que existen en la canalización, que impiden que los vertidos llegen al depósito y se pierdan por distintas fincas de esta parroquia.

Blanco señala que esta deficiencia afecta a los cerca de un centenar de vecinos y que han sido muchos los residentes le transmitieron a su partido esta queja ante la indiferencia del gobierno local. “Paréceme ben que cos fondos do plan estatal de inversións se fagan obras de mellora en pistas ou outras actuacións, pero creo que se deben atender antes os problemas máis urxentes”,dice el nacionalista, y recuerda que el gobierno local destinó recientemente unos 30.000 euros a la reparación de una fuente que dista apenas 100 metros del depósito averiado. “O que hai que facer é amañarlle os problemas aos veciños e non gastar tantos cartos en ornamentar unha fonte, mentres fallan outros servizos fundamentais”. dice.

Blanco añade que en la parroquia de Piloño existe un problema similar desde hace tiempo y le reprocha al concello su escaso interés por solventar este problema vecinal, del que ya había advertido al gobierno cruceño hace tiempo. En ambos casos, el nacionalista demanda al ejecutivo de Jesús Otero que realice las obras necesarias para garantizar un correcto funcionamiento de los servicios.