El Ministerio de Cultura considera que el Pazo de Liñares cumple con todos los requisitos necesarios para recibir el 1% cultural derivado de la construcción del Tren de Alta Velocidad (TAV), según reveló ayer el portavoz del PSOE de Lalín, Manolo González Aller, tras mantener un encuentro en Madrid con representantes del departamento estatal. El ministerio valor especialmente el inicio del expediente de Bien de Interés Cultural (BIC), su proximidad con las obras ferroviarias y el tratamiento de una actuación integral, ya que se trataría de su total restauración por un importe de 2,3 millones de euros, según el anteproyecto del concello.

Ante esta situación, Aller se puso en contacto ayer con el alcalde lalinense, Xosé Crespo, en lo que constituye la primera colaboración de PP y PSOE lalinenses en los últimos tiempos que sale a la luz pública. El socialista le indicó la necesidad de "traballar todos xuntos nunha mesma dirección", ya que pese al apoyo de Cultura es necesario cumplir con los requisitos de la comisión, en la que también se encuentra Fomento.

Así, Aller concretó que el concello tendrá que mostrar un "evidente compromiso" de cofinanciación, ya que el criterio principal del reparto se basa en este aspecto, especialmente por las administraciones locales, y en la remisión de un proyecto de ejecución detallado. En cuanto a la aportación económica del concello, cabe señalar que la inversión estatal no podrá superar el 75% del coste, por lo que, en el mejor de los casos, sufragará 1,72 millones de euros.

Con estos datos recabados en Madrid, el PSOE cree que se debe actuar con celeridad, ya que la comisión interministerial se volverá a reunir a mediados de enero y, aunque se sabe que no será el último encuentro, estima que "convén ir facéndose sitio".

En todo caso, el portavoz socialista también se refirió al que puede ser el principal punto de fricción con el gobierno local, precisamente en un momento en que las relaciones entre ambas partes se han recrudecido. Así, Aller apuntó que Cultura "ve con bos ollos" su propuesta de convertir Liñares en el Museo dos Pazos de Galicia, mientras que el ejecutivo de Crespo siempre ha apostado por un edificio polivalente con una clara orientación hacia la Feira do Cocido. "Sería bo traballar man con man entre goberno e oposición en que os usos previstos para o pazo coincidan cos proxectos de execución", advirtió el portavoz socialista.

En todo caso, y pese al apunte sobre las posibles divergencias entre ambas formaciones, Aller insistió en que el apoyo de Cultura y la posibilidad de recibir el 1% del TAV se trata de "unha oportunidade única" para rentabilizar las inversiones municipales realizadas en el Pazo de Liñares, adquirido por el concello hace seis años por casi 700.000 euros. El socialista no desaprovechó la oportunidad de recordar que la gestión realizada hasta la fecha ha sido "nefasta".

Por último, se refirió al riesgo de que el pazo se declare BIC, ya que el concello tendría que asumir la carga económica de su conservación, pero también apuntó como ventajas de este proceso la rehabilitación de un edificio histórico y su conversión en un polo de atracción turística para la comarca.