Ana Cela / A ESTRADA

Nunca vin tantos xabaríns xuntos. Estamos verdadeiramente desesperados", apunta el vecino de la parroquia estradense de Lamas Jesús Conde. En la mañana de ayer dirigía sus pasos hacia el consistorio para trasladar al alcalde su deseo de mantener una entrevista con el delegado provincial de la Consellería de Medio Ambiente bajo la pretensión de hacerlo partícipe de una situación que asegura se está haciendo insostenible. Este estradense, también presidente de la Asociación de Productores Lácteos da Estrada (Aprolaes), señaló que desde hace aproximadamente un mes en puntos como Lamas, Pardemarín, Olives, O Foxo o Rubín numerosas manadas de jabalíes están acabando con toda plantación que encuentran a su paso.

"Onte mesmo (por el martes) vimos unha manada con 15 animais e o outro día outra con 12", aseguró este estradense, quien subrayó que este tipo de fauna está arrasando con las plantaciones de maíz de la zona. "En dúas noites chapodan unha hectárea; hai fincas de dúas hectáreas de millo que non teñen un só grao", subrayó Conde, que hizo hincapié en que la acción de estos animales impide que las cosechas lleguen a salir adelante. "É unha verdadeira plaga", lamentó.

Cabe recordar que vecinos de esta zona ya habían presentado en su día un elevado número de firmas para solicitar la intervención de las autoridades pertinentes y proteger sus cosechas, su trabajo y su esfuerzo diario de la devastadora acción de este animal.

La huella del jabalí también se dejó sentir en las inmediaciones del Pazo de Oca. En concreto, esta fauna irrumpió en un vivero de boj ornamental ubicado en una finca fuera de la muralla de esta noble edificación y ocasionó cuantiosos destrozos arrasando una superficie de 2.000 metros cuadrados -a razón de 4 plantas por metro cuadrado-, con pérdidas que fuentes pertenecientes al mantenimiento de esta instalación cifraron entre 20.000 y 25.000 euros.