El Concello de Lalín va a iniciar la tramitación de una nueva modificación del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) que está orientada a permitir la construcción de inmuebles en el rural, ya que el paso del Tren de Alta Velocidad (TAV) por el municipio causa importantes afecciones urbanísticas a 750 vecinos de siete parroquias.

En concreto, la red ferroviaria afecta a 21 lugares del rural lalinense, que suman en global casi 1,5 millones de metros cuadrados con la calificación de suelo de núcleo rural. El TAV discurre en algunos casos por encima de estos espacios y en otros a menos de los 70 metros de línea de protección que exige esta infraestructura. Por ello, las posibilidades de edificar para estos vecinos, y especialmente para las 20 familias que han visto o verán derribadas sus casas por este tren, son bastante reducidas. Los casos más flagrantes se encuentran en Vilar do Xestal, A Pena y Porto, pero en todas las situaciones se encontrarán con grandes o insalvables dificultades de carácter urbanístico.

De este modo, los ediles Román Rodríguez y Antonio Rodríguez explicaron ayer que proyectan una modificación puntual muy especial, ya que no se pretenden reubicar estos 1,5 millones de metros de suelo de núcleo rural, sino que los cambios se orientarán a estudiar caso por caso la problemática de cada vecino que quiera construir una vivienda y, sobre todo, la de las 20 familias que se quedan sin hogar.

Román Rodríguez espera que esta solicitud cuente con "flexibilidade" por parte de la Xunta de Galicia, ya que la parte clave de su tramitación corresponderá a las consellerías de Medio Ambiente y Política Territorial. Es decir, si alguno de estos departamentos bloquea la modificación puntual, ésta no saldrá adelante.

"Cremos que está moi xustificada, sobre todo para os veciños aos que se lles tira a casa e non teñen outra finca en solo de núcleo rural. Aí a Xunta ten que ter sensibilidade e incluso certa flexibilidade aínda que non se cumpra strictu sensu a Lei do Solo", suplicó el concejal de Urbanismo. De este modo, dejó claro que su intención es la de contar con permiso autonómico para ir recatalogando zonas anexas como suelo de núcleo rural, aunque siempre examinando cada caso.

Incluso, el gobierno lalinense no descarta la opción de apoyarse en la Consellería do Medio Rural por medio de un informe, ya que este departamento basa su política en la adopción de medidas para frenar el despoblamiento de las parroquias e incluso en acciones que les permitan ganar vecinos.

Finalmente, Román Rodríguez reconoció que esta modificación puntual se plantea ante la necesidad de "gañar tempo", ya que la adaptación del Plan Xeral a la Lei do Solo se encuentra paralizada sin que se atisbe su reanudación. De hecho, cree que los vecinos no cuentan con tanto margen para optar a edificaciones, ya que señaló que la adaptación del PXOM de Lalín depende de que la Xunta introduzca reformas en la Lei do Solo y este proceso también se encuentra atascado, señaló el edil de Urbanismo.