Si bien la situación parece irreversible debido a la gravedad de las lesiones, Francisco Javier Lores Iglesias todavía se debate entre la vida y la muerte en el Hospital Clínico de Santiago tras recibir el impacto de la loseta que se cayó de la fachada del edificio de Xeneral Pardiñas mientras se encontraba en la terraza de una cafetería.

La violencia del impacto le causó unas heridas de tal importancia que perdió totalmente la consciencia a las pocas horas de ser ingresado en el centro hospitalario, por lo que ya pocos apostaban por su vida en la noche de ayer. Lo cierto es que pese a que a última hora de ayer aún mantenía las constantes vitales, la gravedad de su estado hace albergar muy pocas esperanzas de recuperación.

Natural de Pontevedra y padre de una hija, Javier Lores era el propietario de La Pizzeta de Javi, establecimiento ubicado en la Plaza de Galicia. Anteriormente había regentado un restaurante en Pontevedra llamado "La Cueva de Javi" y, a sus 54 años, es una persona muy conocida dentro del ámbito de la hostelería. Actualmente residía en Vilagarcía, donde trabajaba.