El estado de las aceras en diferentes puntos de Vilagarcía se ha convertido en objeto de protestas vecinales. El mal estado del firme en las zonas de paso de peatones ha derivado en más de una caída en las últimas semanas, una situación que ayer se repitió cuando una señora de 84 años se precipitó al suelo tras tropezar con una loseta de acera levantada en la zona de O Piñeiriño.
Son varios los puntos que se han catalogado como de evidente peligro para los viandantes debido a la rotura del firme y a la inestabilidad consecuente. La agrupación Marea da Vila también ha querido potenciar el malestar vecinal señalando que "nos están llegando quejas por las numerosas caídas que se producen debido al mal estado de las calles y las aceras, algo que en muchos casos afecta a personas mayores y tienen como consecuencia lesiones", señala la concejala de María de la O Fernández González. "Hay denuncias en redes sociales y en actas de las Xuntas de Goberno que reflejan las numerosas reclamaciones y que habitualmente son desestimadas", añade.
Otro de los lugares de Vilagarcía cuyas aceras presentan un estado de deterioro evidente es la calle sartages, en Vilaxoán. Los vecinos denuncian que se levantan literamente trozos de acera, una cuestión de la que señalan ha sido informado el Concello en varias ocasiones, sin obtener respuesta al respecto. Precisamente la queja de los residentes en el lugar también comprende la acumulación de basura en la entrada de la calle, donde son muchos los coches que depositan allí objetos desechables de considerable tamaño sin ningún tipo de reparo.
"El gobierno local parece más partidario a las obras que al mantenimiento", señala la portavoz de Marea da Vila, quien recuerda que el último anuncio de inversión para la reposición de baldosas data de abril de 2018 y se cifraba en 5.363? la cuantía de las losas adquiridas. "Esta cantidad parece ridícula si tenemos en cuenta el estado actual de las aceras, pero lo sorprendente es que algunas de esas reposiciones tardarán más de dos años en ejecutarse, como es el caso de la Avenida de A Mariña en la que la sustitución se hizo el pasado mes de agosto, en pleno verano y motivando las quejas del sector hostelero por lo inoportuno del momento".
Marea da Vila le pedirá al gobierno local "que aclare si va a actuar sobre este tema en los próximos meses y que realice un estudio global sobre el estado actual de las aceras y accesos peatonales con el fin de evaluar las necesidades y presupuestar las partidas económicas pertinentes para llevar estas obras a cabo, además de, a la mayor brevedad, señalar y acotar las zonas para evitar riesgos hasta el momento en el que se inicien las sustituciones".
Culmina María de la O Fernández apuntando que "una cosa es rechazar las reclamaciones de las personas que tropiezan e incluso sufren lesiones por culpa del desinterés del gobierno local en este tema, pero no corregir el problema y permitir que la gente continúe tropezando para luego excusarse en que el obstáculo era perfectamente visible, casi que parece una burla".
La céntrica calle Valentín Viqueira o la zona próxima al mercado también han registrado caídas en las últimas semanas. Un riesgo por el estado del firme que añade estos días el derivado de la acumulación de lluvias y que aumenta, según los vecinos, la probabilidad de caídas y también de las salpicaduras que se producen al pisar una de las baldosas sueltas sobre los charcos que se acumulan a su alrededor.
