Los turistas que habitualmente pasean por la isla de A Toxa o cogen los catamaranes de pasajeros que les llevan a conocer la ría de Arousa se desayunaron ayer con una sorpresa en la zona de A Cabreira. En esa piedra, que alcanza una importante altura cuando hay bajamar, se encontraba un barco de bajura como si alguien lo hubiese depositado de forma cuidadosa sobre las rocas.

Pero cómo llegó la embarcación hasta allí. Todo se debió al capricho de las corrientes. La embarcación se encontraba faenando a primera hora de la mañana en una zona próxima, con el patrón más pendiente de las artes de pesca que de la deriva que llevaba el barco mientras era arrastrado por las fuertes corrientes que se registran en esa zona a causa de la marea. Así, el mar fue llevando el barco hasta esos "cons" donde lo acabó depositando y cuando el patrón quiso darse cuenta, ya era demasiado tarde, ya que la bajamar lo había dejado atrapado. El hombre lo aseguró y alertó al muelle de Cambados de lo ocurrido. Desde allí se desplazó un barco bateeiro al lugar para remolcarla a puerto o, en caso de ser necesario, izarla a bordo.

Durante horas, la embarcación permaneció en lo más alto de A Cabreira, como si fuese una escultura más que un barco varado, aunque el temor del patrón era que hubiese sufrido daños importantes que pusiesen en riesgo la flotabilidad de la embarcación. No fue así, sobre las 18.00 horas, la pleamar devolvió el barco al agua sin un rasguño y tanto su propietario como los barcos de apoyo que se desplazaron hasta A Cabreira a ayudarle regresaron a la dársena Cambados, donde la embarcación quedaba amarrada ayer tarde a la espera de una comprobación más minuciosa sobre los posibles daños sufridos, aunque estos parecen mínimos.

Durante su estancia en lo más alto de las piedras de A Cabreira, la embarcación fue retratada en un sinfín de fotografías y vídeos que pronto comenzaron a viajar por las redes sociales hasta convertirse en virales, sobre todo por la espectacular forma en la que quedó la embarcación, como totalmente posada sobre las piedras más altas del puntal de A Toxa.