La preocupación va en aumento en la ría de Arousa a causa de la presión ejercida por vecinos y visitantes sobre algunos espacios naturales de singular valor, algunos de ellos amparados por diversas figuras de protección medioambiental.

Ya se habló en repetidas ocasiones de lo que sucede en la isla de Areoso, donde la afluencia descontrolada de embarcaciones y bañistas no deja de causar estragos.

Algo parecido sucede, y de ahí las quejas escuchadas en los últimos días en San Vicente de O Grove.

Particularmente en el entorno de la playa de Con Negro, donde es tal la cantidad de turismos y autocaravanas que estacionan a su lado que llegan a producirse grandes embotellamientos.

Lo mismo que en otros arenales de la parroquia, donde hay vehículos que llegan a invadir los cordones dunares. Los denunciantes advierten de los daños causados a la flora y la fauna.