El Pazo de Rubiáns, en Vilagarcía, fue ayer escenario de la presentación del proyecto gallego "Fisterra Bovine World", acto en el que participó el director de la Axencia Galega da Calidade Alimentaria (Agacal), Manuel Rodríguez, entre otros asistentes.

El proyecto nace en una finca situada en el concello coruñés de Ames, concretamente en la aldea de Trasmonte, por donde pasa el Camino de Santiago que acaba en Fisterra, de ahí el nombre de la iniciativa.

Los promotores hermanan en esa parcela durante 24 meses razas bovinas de todo el mundo, "con la máxima pureza y una edad semejante", explican. "Trece razas bovinas distintas con morfologías diferentes alimentadas y criadas bajo el sistema ganadero gallego, usando alimentación propia de la zona basada en maíz autóctono del país y pastos cercanos al mar", añaden.