Antes del estado de alarma, el Ayuntamiento de Meis proporcionaba alimentos a ocho familias del municipio que estaban atravesando por problemas económicos. A mediados de abril, ya llevaba comida a 16, y ahora superan la veintena, por lo que el número de viviendas con dificultades económicas severas se ha triplicado desde el inicio de la pandemia.
La alcaldesa de Meis, Marta Giráldez, confía en que la situación se haya estabilizado, "porque algunos vecinos han empezado a cobrar las ayudas extraordinarias por el Covid-19 o les han venido estimadas". Pero admite que la rápida explosión de casos de familias de su municipio con dificultades para comprar alimentos básicos la ha desconcertado. Tanto es así que lo sucedido estos dos últimos meses, "nos ha hecho cambiar nuestras prioridades como equipo de gobierno".
"Ahora lo prioritario es ayudar a las personas", plantea, por encima de las obras o el mantenimiento de ciertas infraestructuras. A modo de ejemplo, cita el estado de algunas pistas rurales y de los caminos de senderismo, muchos de los cuales están necesitados de un desbroce urgente por el crecimiento de la maleza. Sobre esto, la regidora recuerda que el Ayuntamiento no ha podido contratar personal para reforzar esas tareas durante el estado de alarma y que además algunos de los operarios actuales tuvieron que echar una mano en la atención a las familias vulnerables.
Alimentos solidarios
El Concello de Meis optó por la puesta en marcha de un banco solidario de alimentos. Los particulares pueden dejar sus donaciones en unas cajas habilitadas en los supermercados; hay comercios y empresas que también donan productos; y varias asociaciones del municipio dejaron cheques en las tiendas, para que el Concello comprase lo que más falta le hiciese en cada momento. Unas muestras de solidaridad que Marta Giráldez agradece enormemente, y que han permitido al Concello realizar ya tres repartos de alimentos.
La alcaldesa también valora, "la honestidad" de vecinos que han empezado a cobrar la ayuda del Covid-19, y que llamaron al Concello para explicar que por el momento no necesitarán alimentos, de modo que se puedan destinar esos recursos a otros vecinos que todavía lo estén pasando mal.
Marta Giráldez todavía no se atreve a perfilar las líneas de los presupuestos municipales de 2021, pero recuerda que, "las noticias no son halagüeñas. El riesgo de rebrote está ahí".
