El programa Vacacións en Paz se suspende, por lo que este verano no viajarán a O Salnés los niños de los campamentos saharauis. Hace unas semanas, el colectivo Ledicia Cativa anunciaba a sus socios la cancelación de las estancias en Galicia de niños procedentes de la región de Chérnobil. En aquel momento, las autoridades saharauis todavía no habían adoptado una decisión sobre el Vacacións en Paz. Ahora ya lo han hecho, y el dictamen era el esperado.
El programa se suspende por la grave situación sanitaria provocada por el coronavirus. Una docena de familias de O Salnés no podrán por tanto reunirse este verano con los niños a los que acogieron los pasados cursos. La Delegación Saharaui para España resalta a través de un comunicado que, "por muy doloroso que pudiera resultar (la cancelación del programa), a nuestro juicio, es la mejor opción por la que podemos decantarnos en estas circunstancias excepcionales que atraviesa el mundo".
Solidariedade Galega co Pobo Saharaui (Sogaps) ya ha comunicado la suspensión de los viajes a las familias de acogida. Pero anuncia que se va a organizar una caravana solidaria con el Sahara, para enviar a los campamentos de refugiados alimentos, medicinas o juguetes, y aliviar en la medida de lo posible la situación de los menores. Hay que tener en cuenta que los asentamientos saharauis están ubicados en zonas desérticas en las que en verano se pueden alcanzar los 50 grados centígrados.
Una de las finalidades de Vacacións en Paz es, precisamente, la de evitar que los niños de corta edad tengan que soportar unas condiciones climáticas tan extremas en verano. Pero este año el programa se suspende, por primera vez desde hace 25 años.
Garantías para 2021
La Delegación Saharaui para España confía en que la actual crisis sea transitoria, y que las diferentes organizaciones de apoyo al pueblo saharaui mantengan en años venideros los programas de apoyo al Sahara, que lleva reclamando desde hace décadas su independencia de Marruecos, estado que absorbió el territorio tras la salida de España del Sahara.
Desde los campamentos de refugiados llaman la atención sobre la delicada situación de los niños.
