La Policía Nacional se llevó detenido poco antes de las dos de la tarde a C. N.R, de unos 60 años, uno de los históricos empresarios conserveros y de otros ramos de Cambados, tras un somero registro en uno de sus chalés de la clasista urbanización de O Rial (Vilagarcía de Arousa) tras hallarse en su interior distintos útiles aptos para un supuesto laboratorio clandestino de estupefacientes.
El operativo comenzó ya a las siete de la tarde del domingo cuando una patrulla policial se presentó frente al chalé que fue vigilado de forma permanente mientras se esperaba la autorización para proceder el registro del interior. La patrulla permaneció durante toda la noche en las inmediaciones con el claro propósito de impedir el acceso de cualquier extraño a la misma, pues la vivienda está deshabitada.
Y ya por la mañana se procedió a la comprobación en el interior, tanto del garaje como de otras dependencias del inmueble del que se llevaron distintos útiles, entre ellos una máquina de gran tamaño similar a un molinillo o prensa, válidos en procesos de transformación de estupefacientes, aunque no trascendió si se halló alguna cantidad de droga.
La vivienda se encuentra situada en plena urbanización de O Rial, una zona residencial de élite de Vilagarcía, que cabe recordar fue construida por la empresa del ahora implicado en esta operación de la Policía Nacional.
La actuación policial fue supervisada por la Letrada de Justicia del Juzgado número 2 de Vilagarcía, si bien el caso ya pasó al 3 por el cambio de turno oficial, que será ante quien declare esta mañana el detenido en esta operación policial.
Los agentes retiraron varias bolsas con objetos que encontraron en el sótano de esta vivienda, entre ellos bidones que podrían contener productos empleados en los laboratorios clandestinos, que fueron trasladados a la comisaría.
Cabe señalar que el empresario se presentó voluntariamente en la vivienda y apenas pasó unas horas en comisaría, donde además de instársele a prestar declaración le tomaron huellas e hicieron distintas fotografías. Después pudo regresar a su domicilio con el fin de seguir el protocolo del coronavirus que le exhimió del calabozo pues entienden que el investigado va a comparecer voluntariamente ante la juez.
