El Instituto Tecnológico para el Control del Medio Marino de Galicia (Intecmar), una referencia a nivel mundial en lo que a garantía de calidad de los productos del mar se refire, adapta sus servicios a la situación de emergencia sanitaria provocada por el coronavirus COVID-19.
Esto quiere decir que aplica una reestructuración interna mediante la que garantizar, si el sector lo desea, la continuidad de la actividad extractiva, que por otra parte está en franca regresión y va camino del cierre total.
Lo que hace el centro que dirige Covadonga Salgado, pensando, sobre todo, en el cultivo y comercialización del mejillón de batea, es fijar unos servicios mínimos con los que garantizar la continuidad de las pruebas analíticas que se realizan en estas instalaciones, tanto con los diferentes productos como con el agua en la que se cultivan para, en todo momento, ofrecer al consumidor la plena seguridad alimentaria.
Se ajusta al estado de alarma
Desde la Consellería do Mar, de la que depende el laboratorio asentado en Vilaxoán (Vilagarcía), puntualizan que se trata de ajustar el funcionamiento del mismo a la declaración del estado de alarma decretada por el Gobierno de España, como también a las medidas preventivas en los lugares de trabajo del sector público autonómico, aprobadas por la Xunta.
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En definitiva, que el Intecmar va a seguir prestando unas funciones que considera "de carácter esencial" para garantizar esa seguridad alimentaria "imprescindible para el abastecimiento de productos del mar a la población".
En defensa de la economía del sector primario
Pero también vital "para que la economía de nuestro sector primario se resienta lo menos posible y que los moluscos bivalvos, en particular, puedan llegar a los mercados con las mismas garantías sanitarias de siempre".
En el momento de dar a conocer la puesta en marcha de tales "servicios esenciales", que se mantendrán "hasta que se supere la situación que motivó la adopción del actual estado de alarma", el equipo que dirige Covadonga Salgado apela a la comprensión de los trabajadores del mar ante "los cambios obligados que nos vemos obligados a introducir en los servicios ofrecidos regularmente por el Intecmar".
