Carlos Cid (50 años), Ana de Lorenzo (48), Aldán (11) y Madi (7) integran una familia vilagarciana "totalmente implicada en el confinamiento" y de lo más respetuosa "con todas las normas marcadas" por las autoridades sanitarias. Explica Carlos que "los niños son conscientes de lo que está sucediendo y se han convertido en la esperanza en estos días tan complejos, en los que tratamos de mantener rutinas en la medida de lo posible, con actividades como lectura, tareas del cole y labores del hogar". Por las tardes "todo es más distendido y hacemos alguna actividad conjunta, como títeres, baile o intercambio de roles; siempre antes de la cita social de las 20.00 horas, cuando salimos a la ventana para aplaudir y cantar con los demás vecinos".