Buena muestra de la dificultad de lo conseguido por José Ángel Nogueira está en todo el esfuerzo empleado para poder disfrutar de su primer Campeonato del Mundo. "Son muchos años de intentarlo. Antes de la crisis también se hacían clasificatorios en Galicia, pero llevábamos como ocho o nueve años no teniendo esa posibilidad en casa", apunta.

La perseverancia en medir su nivel en el escaparate mas importante del planeta le llevó incluso a viajar a Luxemburgo buscando una oportunidad. "Fue hace dos años, y como en Galicia ya no había esa posibilidad, me animé con permiso de la familia, pero no hubo suerte".