El Panda Raid se ha convertido en la ilusión hecha realidad de dos aficionados al motor de Vilagarcía, más concretamente de Solobeira. Se trata de Pedro Iglesias Barreiro y Santiago Serantes Barreiro quienes a partir de este viernes iniciarán una aventura en Marruecos como pilotos de un rally muy particular a bordo de su Fiat Panda.
Por delante les esperan siete tramos de altísima exigencia por zonas desérticas, pero en las que la habilidad y la orientación serán mucho más importantes que la propia potencia del motor para estar en lo más alto de la clasificación. El perfil de las etapas marcará el ritmo de los participantes. La clasificación de Panda Raid se basa en un sistema de puntuación que tiene en cuenta la navegación (al tener que cumplir con todos los controles de paso) y la velocidad media en algunos sectores de la etapa.
La brújula será su fiel compañera de viaje en un evento en el que la tecnología queda obligatoriamente en un segundo plano. "La organización te da un libro de ruta y te marca unos tiempos para llegar a la meta. Cuanto más te ajustes a esos tiempos más puntúas, pero sin más ayuda para orientarte que la brújula. Los caminos para llegar los tienes que elegir tú. La estrategia es la clave para hacerlo mejor o peor", apunta Pedro Iglesias.
Con un vehículo de 2003, pero sometido a diferentes ajustes para este rally, los dos primos reconocen que el único y verdadero objetivo no es otro que "disfrutar de la experiencia". Y es que además tuvieron que llamar a muchas puertas para poder reunir un presupuesto acorde a la cita.
En esta línea, el propio Pedro reconoce que "conocí el Panda Raid hace ocho años y desde entonces me marqué la meta de poder participar en alguna ocasión". Por motivos presupuestarios ni siquiera han puesto inconveniente a tener que atravesarse en su Fiat Panda toda la península para estar el viernes en Almería para las verificaciones técnicas y administrativas. Desde allí tomarán un ferry hasta Nador donde al día siguiente completarán una etapa prólogo de 80 kilómetros.
Respecto al rol durante el rally, Santiago, mecánico de profesión, se muestra dispuesto a todo, "si toca conducir lo haremos. Hay tramos muy largos y habrá que hacer de todo". Por delante les esperan casi 3.000 kilómetros en siete etapas diseñadas de forma progresiva de manera que permitirá a los equipos hacer su propio test de habilidades en las primeras etapas y posteriormente avanzar hacia las etapas más exigentes del raid.
