La expansión del coronavirus, el creciente temor en la sociedad y las advertencias realizadas desde diferentes Gobiernos, están provocando la cancelación de infinidad de viajes académicos o de fin de curso en colegios e institutos de la comarca de O Salnés y de toda Galicia, sobre todo con destino Italia. La suspensión de esas excursiones ha desatado el caos, tanto en las agencias que las programaron como en las asociaciones de padres de alumnos y la comunidad educativa en su conjunto, dando lugar a episodios de crispación y a importantes pérdidas económicas.
Resulta que las administraciones públicas aconsejan no viajar, pero no lo prohíben. Esto hace que las empresas aseguradoras no se hagan cargo de la devolución de los pagos anticipados que realizaron ya los padres de los alumnos; algo que sí harían si el viaje fuera oficialmente prohibido por la Xunta o el Estado central, que no es el caso.
"Inviable y ruinoso"
Lo que sucede es que los turoperadores tampoco pueden devolver ese dinero por su cuenta y riesgo, ya que ha sido entregado ya en destino, tanto en empresas de transporte como en hoteles, y esto implica que asumir esa devolución resulta "del todo inviable y ruinoso".
En las agencias lamentan la falta de transparencia y de concreción de las administraciones, pues "el propio Ministerio de Sanidad difundió un comunicado en el que aconseja no ir a las zonas de riesgo, pero en el mismo también deja claro que 'no se prohíbe' la asistencia a dichos destinos".
"Enorme confusión"
"Eso genera una enorme confusión", indican en la agencia de viajes Clae, con sede en Vilagarcía y encargada de excursiones previstas en diferentes centros educativos de la localidad vilagarciana y otras como Vilanova, Cambados y Meis.
En su caso tiene contratados viajes a Italia que ahora se ven amenazados por las advertencias "poco claras" de la Xunta y el Estado español. Se refiere a comunicados como el remitido por la Dirección Xeral de Saúde Pública de la Consellería de Sanidade a los diferentes centros educativos de Galicia, en el cual se transmiten las recomendaciones, que no prohibiciones, del Ministerio de Sanidad.
Ese documento resalta que "debido a la epidemia de coronavirus en el norte de Italia, en este momento en las regiones del Piamonte, Lombardía, Veneto y Emilia-Romagna, y después de tener conocimiento de viajes del alumnado de determinados colegios e institutos, tanto públicos como privados, así como de intercambios de alumnado con el país italiano (?) pedimos que se eviten, salvo que sea estrictamente necesario hacerlos".
La propia Xunta pide que esta comunicación sea puesta a disposición de profesores y padres de alumnos, y cuando esto se hace muchos optan por cancelar las excursiones y pedir la devolución del dinero, cuando esto, como se explicaba anteriormente, no parece factible.
"Cancelación voluntaria"
Es, llegados a este extremo, cuando surgen las complicaciones, que pueden ir a más en las próximas semanas. "Al no existir una prohibición, los seguros no cubren la devolución del dinero, ya que la cancelación se considera voluntaria, por lo que se están generando a los padres, debido a la cercanía de las fechas de salida, gastos de hasta el cien por ciento del viaje, o en algún caso un poco menos", explican en Clae.
Esta agencia, que es una de las más importantes de la comarca en la organización de viajes escolares, lamenta que "se está generando inquietud y se está perjudicando a los padres de los alumnos porque ni Sanidade ni Educación explican la verdad de lo que está pasando, y lo que esto provoca es que los padres protesten a los profesores responsables del viaje y estos, a su vez, a las agencias, a las que en algún caso pretenden denunciar por no devolverles el dinero".
Ya pagaron
Juan Jesús del Valle y Carlos Noya, los responsables de Clae Viajes, detallan que ya han abonado "vuelos y trenes en Italia, guías, entradas a diferentes museos o espectáculos, una buena parte del coste total de los hoteles y otros gastos por los que no vamos a recibir compensación alguna que podamos devolver a los centros educativos que han contratado estos viajes".
Lo que quieren decir, al tiempo que lamentan la situación generada y responsabilizan a las autoridades por no prohibir tajantemente los desplazamientos, ya que esto obligaría a indemnizar a las aseguradoras, es que "no pueden devolverse esos gastos ya generados y firmados tanto por nosotros como por los receptivos o mayoristas italianos y los propios centros educativos".
Reclamaciones
Pero hay un problema añadido, y es que "a causa de la desinformación de algunos padres, que insisten en que se les devuelva el dinero o amenazan con dejar de pagar la parte correspondiente, en el caso de los pagos fraccionados, lo que hacen es dejar desprotegidos a los propios centros educativos y sus profesores, que son los responsables de los grupos de viaje organizados, así como a las propias agencias que ya hemos adelantado el capital".
Es por ello que en Clae Viajes, donde tenían previsto el desplazamiento inminente a Italia de 240 estudiantes y profesores, con un coste medio de 550 euros por escolar, esgrimen que los turoperadores "estamos quedando como los malos de la película cuando, en realidad, también salimos perjudicados".
