Responsables del club de piragüismo O Muíño, de Ribadumia, denunciaron ayer la existencia de un nuevo vertido a la altura de la estación de bombeo de Cabanelas, donde se encuentra el hórreo que hay en en la carretera de la concentración parcelaria de Oubiña. Los dirigentes de la entidad deportiva están muy molestos, pues se trata de un episodio recurrente en el tiempo.

"No es un problema de hoy (por ayer). Es un problema continuo. O no encuentran o no quieren encontrar la solución", manifestó uno de los entrenadores del equipo, José Manuel Vázquez. O Muíño sufre directamente los vertidos puesto que estos se producen muy cerca de donde entrenan sus deportistas, entre los cuales hay docenas de niños.

A escasa distancia del área recreativa de Cabanelas, río arriba, existe una estación de bombeo que desborda con cierta frecuencia. "Aquello daba asco", afirma Vázquez, en alusión a los vertidos que proceden de la estación de bombeo.

En un episodio anterior, habían llamado al Seprona de la Guardia Civil, que abrió diligencias contra el Ayuntamiento de Cambados, pues el bombeo presuntamente defectuoso se encuentra en su término municipal. "El responsable número uno de esta situación es la empresa Espina y Delfín", señalan en O Muíño, en alusión a la empresa adjudicataria del mantenimiento de la red de saneamiento de la Mancomunidade do Salnés.

Vertidos industriales

La Mancomunidade y Espina y Delfín argumentan que la estación de bombeo desborda principalmente por dos razones. La primera es la existencia de vertidos industriales sin depurar, cuyas grasas terminan atascando los filtros del bombeo, provocando que el agua sucia salga por los aliviaderos. La segunda razón son las lluvias, cuando se producen de forma persistente, pues al aumentar mucho el caudal de la red, algunos bombeos no dan abasto para salvar las cotas de nivel. Pero en O Muíño consideran que ninguna de las excusas es válida ahora: "Lleva una semana sin llover, y si los vertidos los produce una empresa, habrá que sancionarla".