La conselleira de Medio Ambiente, Ángeles Vázquez, y los representantes de los Concellos de Vilagarcía de Arousa, Caldas de Reis y Portas firmaron ayer en este último municipio el convenio de financiación para la segunda fase de la Vía Verde do Salnés, con una inversión de 200.000 euros. Los trabajos, según adelantó la conselleira, comenzarán a mediados de marzo con la restauración del puente de hierro sobre el río Umia, y se completarán con actuaciones en todo el trazado, que tiene una longitud total de 9.195 metros.
En lo que respecta al acondicionamiento del puente, se retirarán las vías, protecciones y demás equipamientos auxiliares y se procederá a una limpieza de la estructura con reparación de lo deteriorado y repintado, y por último, se colocará una tarima de madera de unos seis centímetros, así como las nuevas protecciones laterales.
Las previsiones son iniciar los trabajos por la rehabilitación del puente de hierro sobre el río Umia a su paso por Portas, que es de gran valor arquitectónico, al ser considerado como una de las grandes obras de la ingeniería ferroviaria del siglo XIX.
El proyecto que financia la Consellería de Medio Ambiente de la Xunta de Galicia incluye también la intervención en todo el trazado, que abarca los municipios de Vilagarcía de Arousa, Caldas de Reis y Portas, procediéndose a la señalización para la identificación del recorrido, así como la señalización prohibitiva y normativa, lo que implica el diseño, elaboración y colocación de carteleras con tejado, carteles de información general y direccionales, cuatro mesas temáticas, carteles para señalización preventiva, así como los puntos kilométricos y diversa cartelería de contextualización ferroviaria.
Además, se instalarán equipamientos complementarios con la colocación de seis mesas de picnic, siete bancos de madera y quince aparcabicis de cuatro plazas, para que los vecinos y turistas puedan gozar de la zona.
Las obras de la primera fase ya están en marcha con financiación de la Diputación Provincial de Pontevedra y la aportación de los tres Ayuntamientos promotores del proyecto de la Vía Verde do Salnés, la primera de aprovechamiento de la antigua red ferroviaria, actualmente en desuso, que está íntegramente asentada en el territorio gallego.
La actuación de la primera fase, encomendada a la empresa pública Tragsa, consiste en la limpieza y desbroce de todo el itinerario, a excepción del puente sobre el río Umia, así como la formación de los senderos que ocupan la superficie de las antiguas vías del ferrocarril ya retiradas por la empresa ferroviaria.
Estos trabajos ya están bastante avanzados y se espera que puedan estar listos durante la época de la primavera.
Esta senda de uso peatonal y ciclista de 9.195 metros de longitud se reparte en 1.795 metros que discurren por el término municipal de Vilagarcía de Arousa, concretamente en la parroquia de Rubiáns, incluyendo el antiguo apeadero ferroviario en la zona. La zona más extensa discurre por el término municipal de Caldas de Reis, especialmente por la parroquia de Godos, con 4.917 metros. El trazado se completa con otros 2.483 metros en el término municipal de Portas, que acaba en la zona de la antigua estación, junto a la zona de la azucarera.
La recuperación de este antiguo trazado se enmarca en el llamado programa Vías Verdes, coordinado por la Fundación de Ferrocarriles Españoles que, además, desempeña las funciones de información y promoción del mismo. La obra proyectada supone una intervención para la mejora de la protección y conservación del patrimonio natural.
