El incendio en el hotel de O Grove que se produjo a primera hora de la noche del viernes se inició en el interior de la caseta de la piscina, donde se encuentran el motor y los filtros de la instalación.

De ahí, pasó al interior del establecimiento hotelero a través de un cuadro eléctrico situado en las proximidades de la cocina. El humo que se generó por la combustión de los cables entró entonces en el sistema del aire acondicionado, por lo que se extendió a través de él por todo el hotel.

El establecimiento, el Mar Atlántico, está situado en San Vicente, y está cerrado en esta época del año. Por ello, únicamente se encontraban en su interior los propietarios, que se percataron del incendio al llegar a ellos el humo.

Ambos resultaron intoxicados, pero de carácter leve, según los servicios de emergencias.

Los primeros en llegar fueron los miembros del equipo grovense de emergencias, y lograron contener las llamas. Los bomberos de la dotación de Ribadumia tardaron alrededor de 25 minutos, debido a la distancia que hay entre su base y el lugar del siniestro.

El control del fuego no fue complejo, pero los servicios de extinción sí tardaron unas dos horas en ventilar toda la instalación, pues se trata de uno de los hoteles más grandes de O Grove y fue necesario airear las estancias yendo cuarto a cuarto. El incendio causó básicamente daños de consideración en el cuadro eléctrico y la caseta de la piscina.