El centro sociocultural de Vilaxoán se anega cuando llueve. Y no es necesario que diluvie para que se creen charcos en el interior del edificio. Así, los vecinos deben tener a mano varios cubos de los que echar mano para poder seguir realizando sus actividades. Una de las zonas más afectadas es la entrada al salón de actos. "El piso está muy deteriorado de tantas filtraciones de agua. Es cierto que se ha limpiado pero el problema debe de ser del techado", reflexiona el presidente de la asociación vecinal, Juan José Outes.
Los sábados él y un grupo de amigos suelen reunirse en el centro social para ensayar un rato con sus guitarras. De hecho en el festival de comparsas de Vilaxoán que se celebra el próximo viernes 28 actuarán a modo de teloneros.
Durante los últimos días de lluvia tuvieron que ensayar en unas instalaciones en malas condiciones, como se puede observar en la imagen que acompaña este reportaje. Además, "aquí también hay teatro, cursos de inglés y queremos montar un grupo de guitarra en la asociación", señala el portavoz vecinal.
Conocedor de que el Concello de Vilagarcía ha elaborado un proyecto de reforma interior del centro social, Outes espera que se ejecute lo antes posible para poder poner fin de una vez por todas a las inundaciones que sufre este centro de reunión situado frente a la playa de O Preguntoiro. "La imagen que muestra cuando llueve no es muy gratificante. La obra es urgente", apostilla el presidente.
El proyecto ya está redactado, fue remitido a Portos de Galicia a título informativo (el edificio se encuentra en terrenos portuarios pero es de titularidad municipal y las obras no varían la superficie ni el volumen ocupados) y cuenta con un presupuesto de 90.135 euros para ejecutarse, que se financiarán con fondos propios.
La remodelación diseñada por el arquitecto municipal se basa en las necesidades trasladadas por la asociación de vecinos y el club de remo.
Para garantizar la accesibilidad al escenario del salón de actos se construirá una rampa desde el vestíbulo. Se habilitarán nuevas dependencias (un despacho, una sala de reuniones y un pequeño camerino) gracias al espacio que pierde la cafetería, que actualmente está sobredimensionada y se trasladará a una zona más reducida en la fachada principal del edificio.
Con respecto al club de remo, se ampliará el forjado del primer piso para destinar el nuevo espacio a zona de gimnasio. Los tabiques de los actuales despachos de la planta baja se derribarán para ganar superficie para el almacenaje de embarcaciones y la actual zona administrativa situada en el bajo se reubicará en un local en la primera planta.
Las obras se completarán con la reforma de la instalación eléctrica y nueva iluminación, y también se aprovechará para revisar la cubierta del edificio con el objetivo de arreglar filtraciones, limpiar y sellar juntas o canalones.
