Todo se conjuró el domingo en contra de José Luis Vidal Bea, el pescador de O Grove fallecido tras caer de su barco entre las islas de Ons y Sálvora. El mal estado del mar y la altura de los barcos de enmalle dificultaron su rescate, pero este además se hizo más complicado porque el hombre se golpeó al caer del barco, y perdió parcialmente la consciencia. Así lo afirman fuentes próximas a la familia del marinero, que está siendo velado en el tanatorio de la localidad, y que será enterrado esta tarde en el cementerio municipal de O Grove.

Toda la flota llora de rabia e impotencia, por no haber podido sacar del agua a José Luis Vidal Bea antes de que fuese demasiado tarde. "La pena fue no llegar a tiempo", afirma José Manuel Soutullo, patrón y armador del "Chubasco Tres", que fue el primer barco en llegar a la posición del "Tucán Dous" tras la alerta de Salvamento. Los dos hombres que el domingo se habían embarcado en el "Tucán" junto al fallecido sufren el mismo sentimiento de abatimiento por no haber sido capaces de salvar a su compañero, según explican fuentes de su entorno. Lo intentaron por todos los medios, pero no fue posible.

Al parecer, nada más producirse la caída al agua, le arrojaron un cabo, pero Luis Vidal no estaba en condiciones de subir. El patrón y armador del buque optó, inmediatamente, por arrojarse él mismo al agua con un aro salvavidas. El tercer tripulante dio aviso a Salvamento Marítimo, que alertó a su vez al helicóptero de Gardacostas y a los barcos que se encontraban en ese momento entre Sálvora y Ons.

Pero la llegada de los demás barcos tampoco permitió el rescate de dos hombres. José Manuel Soutullo explica que hacía mal tiempo en el mar, "y por eso tardamos un poco más en llegar", de lo que se tardaría en condiciones normales en recorrer el par de millas de distancia que les separaban del "Tucán Dous". Cuando llegaron, lo hacía también el helicóptero.

Se valoró subir a los hombres a bordo, pero el patrón del "Chubasco Tres" explica que la operación no solo podía resultar arriesgada por el estado del mar, sino que también era compleja, "por la altura de este tipo de barcos".

Un rescate complejo

Finalmente, José Luis Vidal Bea y Santiago Domínguez fueron rescatados por personal del helicóptero. Primero, sacaron del agua a José Luis Vidal, ya que todo apuntaba a que era el que estaba más grave; después, al patrón y armador.

No se puede determinar con exactitud cuánto tiempo estuvieron en el agua, pero se calcula que pudo rondar la media hora, según los datos horarios que manejan los servicios de salvamento. Demasiado tiempo para aguantar en el mar en pleno mes de febrero.

Lo que también está pendiente de determinar es por qué se fue al agua José Luis Vidal. Fuentes solventes indican que a falta de que la Guardia Civil concrete las causas del siniestro, la hipótesis que parece más plausible es la de que el pescador se viese fatalmente enredado en el aparejo que estaban largando al mar en ese momento.

Entre tanto, Santiago Domínguez recibió a primera hora de la tarde de ayer el alta, tras pasar un día ingresado en el Álvaro Cunqueiro de Vigo a consecuencia de la hipotermia. Tanto él como el tercer tripulante del "Tucán Dous" se encuentran enormemente conmocionados por la tragedia.

Se suspende la subasta

José Luis Vidal Bea tenía 51 años, y deja viuda y dos hijos. Se le hizo la autopsia en el Instituto de Medicina Legal de Galicia (Imelga), y a media tarde de ayer sus restos mortales llegaron al tanatorio de O Grove.

Hasta allí acudieron muchos compañeros, amigos y vecinos que se acercaron a dar el pésame a la familia, que agradeció las muestras de apoyo. El funeral es esta tarde, a partir de las 17.30 horas, en la iglesia parroquial de San Martiño de O Grove, y posteriormente, Luis Vidal será recibirá sepultura en el cementerio municipal.

La Cofradía ha decidido en señal de duelo por la tragedia suspender la subasta de pescado de esta tarde. El Ayuntamiento, por su parte, decretó dos días de luto oficial, durante los cuales las banderas del consistorio ondean a media asta.