Los cambios aplicados por la Consellería de Política Social sobre las dos educadoras de la Escola Infantil Galiña Azul de Carril, que fueron trasladadas a Vilaxoán a principios de curso y que ahora tienen que volver a su anterior destino, han provocado el malestar de las familias de la nueva guardería vilaxoanesa, que denuncian el daño emocional que la medida provoca en niños de 1 a 2 años. El colectivo, integrado en la asociación Os Piadeiriños, insta a la Administración autonómica a mantener a las educadoras en el centro vilaxoanés hasta final de curso y negociar los cambios para el próximo período lectivo.

Las educadoras trasladadas eran muy apreciadas en la comunidad escolar de Carril y los niños ya estaban haciendo la adaptación con ellas, lo que supuso un problema para ellos cuando se decidió su cambio a la "Galiña Azul" de Vilaxoán. A pesar de las protestas, se mantuvo el cambio con la promesa de que, si en febrero había más matriculación, ambas volverían a Carril.

En el centro vilaxoanés, según explican los padres de alumnos, las profesionales se adaptaron enseguida con las nuevas compañeras y con su nuevo alumnado, niños con edades comprendidas entre 1 y 2 años.

El caso es que, cuando todo parece estar en tranquilidad en ambos centros, la Consellería vuelve a decidir el cambio de las educadoras a Carril para que se hagan cargo de la nueva unidad que se pone en marcha en esta escuela Infantil. De esta forma, las docentes tienen que dejar a los pequeños alumnos que hace pocos meses se aclimataron a ellas, para hacerse cargo de otros nuevos.

Los miembros de Os Piardeiriños entienden que esta decisión es mala para todos e instan a la Xunta de Galicia a poner nuevas educadoras para la nueva unidad de Carril, dejando a las que están en Vilaxoán, al menos, hasta finalizar el ciclo lectivo. Se preguntan los motivos por los que no se contrató desde septiembre a dos educadoras nuevas para Vilaxoán y así no deshacer el de Carril.

Consideran que los cambios organizativos que sean necesarios deberían llevarse a cabo de cara al próximo curso, y que la preparación del mismo sea consensuando las decisiones con las asociaciones de las familias de ambos centros y con las trabajadoras.