Las intensas precipitaciones registradas durante toda la jornada en la comarca convirtieron a localidades como O Grove en grandes piscinas. Especialmente llamativas resultan las riadas formadas en Monte da Vila, de tal forma que las escorrentías arrastran agua, piedras y barro desde las obras del Auditorio Municipal Escuela de Música hacia el centro de la villa y la zona portuaria, introduciéndose de lleno en la peatonalizada calle Castelao.

Esto hace que se produjeran inundaciones tanto en locales comerciales como en viviendas en diferentes puntos de la villa meca, donde también entrañan un peligro considerable las tapas de alcantarillado que han salido despedidas a causa de la fuerza del agua que circula por la red.

También se registraron importantes complicaciones a causa de las inundaciones en el entorno de Terra de Porto y Rons, donde fue preciso cortar la circulación en varias calles y se produjeron grandes problemas cunado los operarios salieron de las fábricas a la hora del almuerzo.

San Vicente y Virxe das Mareas

Asimismo, las bolsas de agua, como sucede cada vez que llueve con cierta intensidad, se repitieron en San Vicente, y de manera muy especial en el entorno de As Bizocas. Lo mismo puede decirse del barrio marinero de Virxe das Mareas, donde la pleamar y las intensas lluvias volvieron a causar estragos.

Contenedores flotando y desplazándose de un lado a otro arrastrados por las riadas, coches con las ruedas destrozadas después de haberlas introducido en agujero, tajeas o alcantarillas imposibles de ver a causa del agua acumulada y vecinos achicando agua de sus garajes son algunas de las imágenes que se repiten en O Grove en esta complicada jornada.

Servicio Municipal de Emergencias

También es de destacar el trabajo que realiza el Servicio Municipal de Emergencias, que multiplica esfuerzos para tratar de atender todas las emergencias que se están produciendo. Incluso se sumaron a estas labores efectivos del departamento que disfrutaban de su día libre o tenían otros turnos de trabajo programados.

Es preciso recomendar a los ciudadanos que eviten salir a la calle si no es estrictamente necesario. Tanto los peatones como los conductores corren un serio peligro a causa de las intensas lluvias, el viento y las inundaciones que se registran durante toda la jornada.