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Las "pedreas" de Navidad propician el aumento de ventas de la Lotería del Niño

Carlos Cores: "En el sorteo de Reyes se vende de todo, hasta los números llamados feos"

La administración de Ribadumia (en la imagen) abrió ayer sus puertas, al igual que la práctica totalidad de las de O Salnés. // Noé Parga

Las administraciones de Loterías de O Salnés vendieron este año más que en 2019 para el sorteo del Niño, que se celebra hoy a partir de las 12 del mediodía. Si bien todavía no pueden aportar porcentajes de incremento definitivos, pues iban a realizar anoche los balances finales, los cuatro administradores consultados por FARO tienen la sensación de que las ventas han subido ligeramente. En buena medida, gracias a las "pedreas" y reintegros del reciente sorteo de Navidad.

Jessica Allo, que abrió el año pasado junto a Rubén Rodríguez "O Conxuro da Meigha" en Barrantes, afirma que, "las ventas aumentaron con respecto al año pasado", gracias en buena parte a las "pedreas" que se repartieron desde la administración en el sorteo del 22 de diciembre. Ese día, los loteros de Ribadumia estuvieron a punto de tocar el cielo, pues uno de sus números abonados, el 26.990, se diferencia en una sola cifra del Gordo, que fue el 26.590. Eso hizo que el 26.990, "se nos agotase en un par de días". Este número se repartió tanto entre los clientes abonados, como entre los establecimientos de A Illa, Meis y Barro que habitualmente compran su lotería en "O Conxuro da Meigha". Durante la mañana de ayer fueron muchos los que pasaron por la administración en busca de los últimos décimos, aunque sin que se formasen las colas de los primeros días.

María Eugenia Breijo, del despacho "No hay Quinto Malo", de Vilagarcía, afirma que "fue mejor la venta de Navidad. La del Niño ha marchado algo más lenta". Sostiene que en ventanilla sí se ha vendido más, pero tiene la impresión de que la lotería que llevaron los bares, asociaciones y clubes deportivos no tuvo tanta salida como otras veces. En cuanto a los números preferidos por los clientes, "la gente siempre tira más por los impares". Eso sí, este año también tuvieron buena aceptación los décimos terminados en 0, por ser esta la terminación del Gordo del 22 de diciembre.

Encargos del País Vasco

Manuel Núñez, de la administración de A Illa, afirma que "se vendió un poco más que el año pasado". "Hubo unas cuantas 'pedreas' en Navidad. La gente recuperó algo de dinero y eso le animó a comprar algo más para Reyes". En A Illa tienen como abonado el 10.987, y en Navidad uno de los segundos premios recayó en el 10.989. En consecuencia, el número de la administración de A Illa, "voló en apenas dos días".

Una empresa de Vitoria siempre les compra ese número, y aunque para Reyes no lo hizo, algunos de sus trabajadores sí pidieron unos décimos a título particular.

Finalmente, Carlos Cores, de la administración de San Roque, en Vilagarcía, afirma que aunque el sorteo de Navidad no fue demasiado bueno para su administración, las ventas para el sorteo de Reyes han estado bastante bien. "Estamos pendientes de hacer la liquidación, pero creo que las ventas han sido ligeramente superiores".

Cores afirma que el sorteo del Niño es muy diferente al de Navidad. El plazo para comprar se reduce a dos semanas, de ahí que no sean tan frecuentes las peticiones de números determinados en busca de una fecha o una premonición. "El de Reyes es un sorteo en el que se vende de todo, hasta los números que se suelen llamar feos".

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