Según un workshop celebrado en Lisboa por el Grupo Europeo de Inundaciones, la sociedad mantiene en su memoria durante ocho años episodios como el que asoló a Vilagarcía aquel 27 de noviembre de 2006. Pero el riesgo de que esas inundaciones se repitan continúa existiendo. El pontevedrés Gonzalo García-Alén Lores asegura que cada año hay una probabilidad del 2% -aproximadamente- de que se produzcan en la capital arousana las mismas riadas que hace trece años. Por ello, y en consonancia con la línea iniciada en un trabajo anterior sobre el impacto del cambio climático en Vilagarcía, este ingeniero de Caminos ha centrado su Trabajo Fin de Máster (TFM) en la mitigación del riesgo de desbordamiento del río de O Con. ¿Cómo? Construyendo un parque inundable en la Finca do Ouro, una parcela urbana y de titularidad privada con 45.000 metros cuadrados de superficie que está situada en las inmediaciones de Fexdega.

Con este estudio, García-Alén acaba de recibir el premio "Rodrigo del Hoyo" al mejor TFM relacionado con la ingeniería hidráulica o energética, así como un accésit del premio "Copasa" al proyecto más innovador en el ámbito de la construcción de infraestructuras. Ambos son galardones otorgados por la Escuela Técnica Superior de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos de la Universidade da Coruña en la que estudia este joven de 24 años.

Tras comprobar con un cálculo hidráulico que existen posibilidades de que un incremento del caudal del río vuelva a inundar el centro de Vilagarcía, el ingeniero pensó en distintas alternativas para reducir, que no evitar, el riesgo de desbordamiento de O Con, como por ejemplo ampliar el embalse de Castroagudín, recrecer los márgenes del río para evitar la salida del agua o construir un parque inundable. ¿Dónde? En el parque de A Coca, en la explanada de Fexdega o en la Finca do Ouro. Fue esta última opción la que salió mejor puntuada en el estudio de alternativas realizado por Gonzalo García-Alén dentro de su Trabajo Fin de Máster, tutorizado por Gonzalo Mosqueira Martínez, profesor y a su vez director de Augas de Galicia.

¿En qué consiste el parque inundable diseñado por el ingeniero pontevedrés? En tiempo seco sería un amplio espacio de esparcimiento al aire libre con zonas verdes, pistas deportivas y aparcamiento público, mientras que en época de lluvia serviría para almacenar agua, evitando que desbordase O Con. Para ello sería necesario realizar una profunda excavación en la Finca do Ouro para conseguir que la cota descendiese hasta el nivel del río. "Habría que colocar unos marcos de hormigón, que son unos tubos de grandes dimensiones, bajo la carretera de Rodrigo de Mendoza. De este modo, al aumentar el caudal se introduciría en el parque inundable de forma natural, mientras que el resto iría por el río. No hacen falta bombeos", explica el autor del TFM.

270.000 metros cúbicos

La zona inundable del parque tendría capacidad para almacenar 270.000 metros cúbicos de agua y en la parte más alejada se construiría una anfiteatro y un aparcamiento para evitar que se dañasen con el agua.

Gonzalo García-Alén indica que obras como las del parque inundable son conocidas como "actuaciones blandas", ya que "la idea es conciliar las crecidas del río con la vida habitual de la ciudad. Adaptarnos, en parte, nosotros a la naturaleza, y no tratar de cambiarla a nuestro gusto". Cabe recordar que su estudio sobre el impacto del cambio climático en Vilagarcía pronosticaba que en 2085 lloverá menos días pero las precipitaciones serán más intensas, por lo que los picos del caudal del río y las escorrentías serán mayores y por tanto el riesgo de desbordamiento también.