El Concello de O Grove retoma las actividades formativas para enseñar a los niños a salvar vidas. Es una labor más importante y valiosa de lo que pueda parecer, ya que los ayuda a superar situaciones que pueden verse obligados a afrontar en cualquier momento. Se trata de clases de urgencias médicas que forman parte del Plan Municipal de Atención á Morte Súbita e Ensino de RCP, puesto en marcha hace un lustro a instancias del concejal de Sanidade, Javier Caneda.
En este ciclo participan alumnos de entre 10 y 16 años pertenecientes a los cuatro centros de Educación Primaria y a los dos institutos de la localidad, tal y como explica el edil.
Como médico que es, y con ayuda del Servicio Municipal de Emergencias y de la enfermera Clara Garrido, se ocupa de impartir conocimientos básicos sobre el tratamiento de traumatismos y heridas, les enseña a actuar en caso de que algún compañero o familiar sufra una crisis epiléptica o se atragante, y hace especial hincapié en la formación para que los jóvenes mecos sepan realizar reanimación cardiopulmonar (RCP).
