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Ibai Otero: "El premio extraordinario de ESO es una gran motivación para mis estudios"

El joven vecino de Cambados combina su afición por las ciencias con la lectura y la práctica y competición en artes marciales

Ibai Otero Gómez, en la biblioteca de Cambados ayer por la tarde. // Noé Parga

El joven estudiante de 16 años del instituto Francisco Asorey, de Cambados, Ibai Otero Gómez, finalizó la Educación Secundaria Obligatoria con un promedio general de los cuatro años de 9,49. Por su alto rendimiento, ha sido distinguido por la Consellería de Educación con el premio extraordinario de ESO, por ser uno de los 20 mejores expedientes académicos en Secundaria de Galicia.

Este reconocimiento le fue comunicado ayer en el instituto, a última hora, donde cursa actualmente primero de Bachillerato de Ciencias. "Este premio es una gran motivación para mis siguientes estudios", declaró.

Ibai Otero está valorando varias opciones para su futuro académico, siempre en la rama de ciencias, aunque, por ahora, su principal interés es estudiar la carrera de Matemáticas. "Es una carrera difícil; aún no sé dónde la estudiaré; Santiago es una buena Universidad en esta materia", apuntó.

Matemáticas está entre las asignaturas preferidas de Ibai Otero, aunque confiesa que en este campo es bastante "friki" y le gusta aprender por su cuenta. Desde esta perspectiva que le dan los conocimientos añadidos a su formación, el joven señala que no le gusta mucho cómo se enseña esta asignatura en el instituto.

Ibai Otero combina su pasión por las ciencias con la lectura y el idioma inglés, una asignatura que le gusta mucho y que considera importante para relacionarse en la actualidad, al ser básicamente una lengua franca. "El inglés es importante en ciencias porque hay que escribir artículos, y la mayoría de ellos están en este idioma".

Otra de las grandes aficiones del flamante premio extraordinario de la ESO, dotado con 750 euros, es el deporte: concretamente las artes marciales. Hace unos meses estuvo en el Mundial de Kenpo, donde también obtuvo medallas. "Me gustan mucho las artes marciales, principalmente porque me ayudan a relajarme y a aprender a defenderme", destacó.

A pesar de su nombre de origen vasco, las raíces de este joven estudiante están en esta ría, ya que su madre es de Vilanova y su padre de A Illa de Arousa.

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