El viento provocó ayer al menos dos incidencias de consideración en O Salnés. La primera de ellas fue sobre la una de la madrugada, en Catoira. Un árbol cayó sobre un carril de la carretera EP-8001, que comunica Catoira con Carracedo, en Caldas, y se desplazó al punto una dotación de Protección Civil de Catoira para retirarlo.

Se trataba de un árbol que ya había sufrido los efectos de un incendio forestal pasado, de ahí que probablemente sus raíces no estuviesen en buen estado y la tierra se haya visto erosionada. Al encontrarse en una de las orillas del vial, su caída afectó a la circulación durante la media hora que Protección Civil necesitó para retirar todos los restos. Posteriormente, en torno a las 11.00 horas de ayer, los Bomberos se desplazaron a András, en Vilanova, pues el viento rompió una voluminosa rama de un eucalipto, y había riesgo de que se cayese también sobre la carretera.

Inicialmente, acudieron al operativo los efectivos del parque de Vilagarcía, al encontrarse András más cerca de ellos que de Ribadumia. Sin embargo, posteriormente fue necesario movilizar también a estos últimos, dado que la rama estaba tan alta que era necesario el camión autoescalera para llegar a ella.

La borrasca no ha dejado durante el fin de semana un rastro especial de incidencias en O Salnés.