Dos fueron los combates que tuvo que superar Óscar Bermúdez para hacerse con el título de campeón gallego en menos de 63 kilos. En primera instancia superó al sadense Jesús Aparra. Recuerda que "es más bajito que yo. Al principio llevó él la ventaja pero luego le di la vuelta y gané por puntos".

Ya en la final, ante Gael Extremadura, las características físicas del vigués le obligaron a cambiar la estrategia, pues "me centré más en atacar el cuerpo. Llevé más la iniciativa de la pelea y me fue bien porque dominé bastante desde el principio".

Reconoce además que en su primera competición oficial "me encontré muy bien sobre el ring. La verdad es que me anima bastante a seguir entrenando y esperamos volver a competir".