Una mujer del barrio de O Sineiro, en el ayuntamiento de O Grove, falleció pasadas las dos de la tarde de ayer al ser arrollada por un autobús en la carretera PO-316. Se trata de Esperanza Otero Gondar, de 62 años, que salía con su moto de la gasolinera de Ardia y fue arrollada por un autobús de Badajoz que regresaba de la Festa do Marisco y se la llevó por delante.
La guía del autobús, aún llorando y visiblemente nerviosa tras presenciar la dramática escena, acertó a explicar a FARO DE VIGO que ella y 54 pasajeros más regresaban tras realizar un singladura en barco por la ría de Arousa. Salían de O Grove y se dirigían a su hotel, situado en Dena (Meaño), para descansar antes de regresar por la tarde a la villa grovense y seguir disfrutando de la Festa do Marisco.
"La mujer salió con su moto de la gasolinera, y en lugar de tomar el carril de aceleración para incorporarse a la calzada invadió el nuestro y se metió delante del autobús, por lo que fue imposible evitar arrollarla", explicaba la joven guía turística.
Según los mismos testigos, parece que la mujer, en lugar de dirigirse por la calzada hacia el istmo de A Lanzada y dar la vuelta para volver hacia O Grove en una rotonda situada a escasos doscientos metros de la gasolinera, habría querido girar inmediatamente, a pesar de las señales que lo prohíben y de la línea continua existente en la calzada. Esa, en cualquier caso, es la versión de los testigos, por lo que habrá que esperar al informe final de la Guardia Civil.
Es, en cualquier caso, una práctica que realizan con frecuencia numerosos conductores, de ahí que tanto el punto de acceso a la estación de servicio de Ardia -que funciona en un solo margen de la calzada- como el de salida, suelan registrar accidentes con relativa frecuencia, aunque no resulten tan graves como el de ayer.
Tras arrollar a la conductora de la moto y arrastrarla junto al vehículo unos metros, el autobús quedó parado en medio de la calzada, obstaculizando la circulación.
Fue preciso requerir la presencia de otro para que los pasajeros siguieran camino hacia su hotel mientras se instruían diligencias y se esperaba el levantamiento del cadáver.
GES Sanxenxo y Policía Local
Es de destacar que hasta el lugar del suceso se trasladaron efectivos de la Policía Local de O Grove, del Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) de Sanxenxo y del 061, que se encargaron de intentar reanimar a la víctima, regular el tráfico, sacar la moto de debajo el bus y despejar la calzada.
Pese a los arduos intentos por salvar a Esperanza Otero, a la que se practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar, los servicios médicos nada pudieron hacer por ella.
También estuvo la Guardia Civil de Tráfico, que practicó la prueba de alcoholemia al conductor del bus, con resultado negativo.
