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Las expediciones científicas y turísticas en busca de cetáceos y aves pelágicas, en su recta final

El aula de naturaleza flotante "Chasula", que amarra en O Grove, detecta una baja presencia de paíños de Wilson, pardelas y alcatraces

Las expediciones científicas y turísticas en busca de cetáceos y aves pelágicas, en su recta final Juan Diéguez / Chasula

A medida que avanza el otoño y empeoran las condiciones meteorológicas disminuyen las expediciones turísticas, científicas y divulgativas que dan cuenta de la abundancia de aves pelágicas y mamíferos marinos en las Rías Baixas. Es precisamente a causa de las dificultades para la navegación que se avecina en esta época del año, que el barco "Chasula" anuncia sus últimas singladuras.

Esta aula flotante de naturaleza con puerto base en O Grove, patroneada por Isidro Mariño, volverá a desplegar el proyecto Chasula Birds el próximo día 12, en este caso con la bautizada como "Pelágica de los rorcuales"; una misión especialmente orientada a la localización de cetáceos, aunque sin perder de vista a aves que, como los alcatraces, paíños o alcas pueden encontrarse en la plataforma continental, y que raramente se observan desde tierra firme.

Ya en noviembre, el "Chasula" zarpará para realizar la llamada "Pelágica tardía", el día 2, y se pondrá nuevamente en marcha el 23, en este caso para centrarse en el avistamiento de aves dentro de la ría de Arousa.

Llegan estas rutas tras constatarse que este año se ha detectado "un bajísimo número de paíños comunes" en relación con ejercicios anteriores.

Pumariño y Diéguez

Aunque no es la única especie que se ha dejado ver poco, ya que el equipo del "Chasula", del que forman parte activa ornitólogos de prestigio como Xabier Vázquez Pumariño y Juan Diéguez, no ha podido ver aún ningún paíño de Wilson. De igual modo que dicen haber apreciado "un bajo número de pardelas y alcatraces".

Sea como fuere, las expediciones realizadas hasta ahora resultaron fructíferas, tanto por el avistamiento de diversos tipos de ballenas, entre ellas la azul, como por la localización de delfines, peces luna y gran variedad de limícolas, gaviotas y cormoranes.

En la última salida, desarrollada el pasado fin de semana, los integrantes de la tripulación del "Chasula" pudieron contabilizar charranes patinegros y una gran cantidad de gaviotas, como la sombría, la patiamamarilla, la cana, la cabecinegra o la reidora.

Al igual que detectaron nueve gaviones atlánticos y ejemplares de págalo grande, págalo pomarino y págalo parásito.

En el listado de aves se incluyen dos paíños europeos, tres pardelas cenicientas, un par de pardelas sombrías, cinco ejemplares de pardela pichoneta, once de pardela balear y 171 alcatraces atlánticos.

Al igual que hicieron acto de presencia el cormorán grande (69), cormorán moñudo (246), garceta común (19), ostrero euroasiático (4), aguja colinegra (6), chorlitejo grande (25), zarapito trinador (11), correlimos tridáctilo (21), correlimos común (3), vuelvepiedras común (3) y el archibebe común (34 ejemplares).

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