Los concellos de la comarca destinan miles de euros a evitar que su red de alcantarillado acabe colapsada por las toallitas húmedas, unas cifras que no pueden dedicar a otros menesteres. Vilagarcía, el municipio con un mayor número de habitantes de la comarca invierte cada año 200.000 euros en desatascar las tuberías de la red de alcantarillado. La red de Vilagarcía está compuesta de 40 bombeos que trasladan las aguas residuales hacia la depuradora de Ferrazo y, en los principales, situados en el entorno de la plaza de abastos, en Carril y en Bamio, el camión de una empresa especializada tiene que retirar todas las toallitas húmedas tres veces por semana para evitar que se atasque y se acaben averiando los bombeos" Esas visitas cíclicas se incrementan en el verano, cuando la población de Vilagarcía se incrementa de forma notable.