Dolor, rabia y luto son solo tres de las palabras que resumen el sentimiento que tienen los vecinos de Valga y que ayer demostraron en una concentración silenciosa a las puertas del consistorio. Medio millar de personas, muchas con la cara desencajada por el dolor, guardaron un sepulcral silencio, solo interrumpido por el paso de los vehículos por la Nacional 550 que culminó con un extenso aplauso en recuerdo de las tres víctimas que ayer se cobró la violencia machista en el municipio.

Poco antes, Bello Maneiro, alcalde de Valga, presidió un pleno extraordinario de los que nunca gusta celebrar, como él mismo reconoció en el arranque de la sesión, un pleno extraordinario que se repite, por segunda vez este año en Valga. La corporación accedió a un salón de plenos lleno de cámaras y vecinos unida, sin distinción de siglas y con un único distintivo que les unía, el crespón negro que todos lucían en la solapa. La voz cantante la tomó la edil de Igualdade, Begoña Piñeiro, que dio lectura al acuerdo unánime al que llegaron las tres formaciones que tienen representación en la corporación: PP, PSOE y Valga Viva.

Ese manifiesto, en el que no se dejaba duda al rechazo a la violencia contra las mujeres decretaba tres días de luto oficial en memoria de Sandra y Alba Boquete Jamardo y de su madre María Elena Jamardo, así como de todas las víctimas de violencia de género. También comunicaba que se suspendían todas las actividades municipales que estaban previstas para estas tres jornadas en señal de duelo por lo que califican como "un terrible asesinato de nuestros vecinas y en apoyo a todos sus familiares y personas allegadas".

El Concello también pone a disposición de todas las vecinas de Valga, y de otros municipios limítrofes los recursos del Centro de Información á Muller (CIM), que ofrece todo tipo de asesoramiento psicológico y jurídico gratuito a las víctimas de la violencia de género.

La corporación también realizó un llamamiento a toda la ciudadanía para que denuncie ante los Servizos Sociais del Concello, el CIM, las autoridades policiales o el 016 cualquier situación conocida de violencia de género con el fin de evitar nuevas víctimas.

Por último, el acuerdo también reafirma el compromiso de todo el Concello de Valga en contra de la violencia machista, prestando atención social y apoyo a las víctimas y a sus familias, y trabajando de forma coordinada con otras instituciones para erradicar esta lacra social.

Además de los vecinos de Valga, en la concentración también participaron políticos de diferentes ideologías, mandos de la Guardia Civil y psicólogos de la Cruz Roja y de la Fundación Amigos de Galicia, mostrando todos ellos su repulsa a este tipo de asesinatos.