Después de dos semanas de reparaciones y asfaltados puntuales del firme, sobre todo a la altura de Ribadumia y Meis, la Autovía do Salnés (AG-41) se dispone a afrontar cinco semanas de intensos trabajos -si las condiciones meteorológicas no lo impiden- para realizar una renovación integral de la capa de rodadura.
Si las previsiones de la Consellería de Infraestructuras se cumplen, a partir de mañana llegará el momento de realizar el gran asfaltado que completará las reparaciones efectuadas hasta ahora, tanto hasta que llegó julio, cuando se suspendieron para evitar problemas relacionados con la masiva afluencia de vehículos a la comarca, como desde que se retomaron, hace apenas quince días.
A partir de mañana, en consecuencia, van a producirse las principales restricciones viarias y se hará preciso que los conductores circulen por diversos desvíos con los que sortear las obras en la vía de alta capacidad.
Festa do Marisco
Las mismas obras, cabe recordar, que la Consellería de Infraestructuras se comprometió a planificar y coordinar para que interfieran lo menos posible en la llegada de miles de vehículos a la próxima Festa do Marisco de O Grove, durante la primera quincena del mes que viene.
Según la planificación inicial de este proyecto, dotado con más de cinco millones de euros, será desde mañana cuando se efectúen "los trabajos de extendido de la nueva capa de rodadura" y se registren los desvíos de tráfico "de mayor importancia", según reconoce la Xunta.
El principal desvío
Esto se debe a que "no existe paso de la mediana anterior al enlace de Curro", motivo por el cual "los trabajos de extendido de la nueva capa de rodadura entre los puntos kilométricos 2 y 3,7, en ambas calzadas, obligarán al desvío del tráfico entre los enlaces de Curro (punto kilométrico 1,8) y Ribadumia (punto kilométrico 9,2), a través de las carreteras PO-300, EP-9305 y VG-4.2".
Inevitablemente, por tratarse de una obra de semejante dimensión, parecen inevitables las molestias para los conductores. En las dos últimas semanas ya se produjeron cortes de carriles alternos que en determinados momentos obligaron a utilizar exclusivamente los dos de una sola calzada, habilitándolos con doble sentido de circulación.
Los trabajos de corrección del peralte en una curva también obligaron a cortar la calzada izquierda de la autovía, desviándose el tráfico al carril de la otra derecha y utilizando los pasos de mediana más próximos.
Repintado y drenajes
Como se explicaba anteriormente, esta actuación, prevista en el contrato de concesión de la Autovía do Salnés y ejecutada por la concesionaria, de acuerdo con un proyecto supervisado y aprobado por la Axencia Galega de Infraestructuras, permite dotar toda la Autovía do Salnés y los ramales de enlace de una nueva capa de rodadura.
Pero también se incluye en la misma la mejora el repintado de la señalización horizontal y trabajos puntuales para reforzar el drenaje de las aguas pluviales.
