José Antonio Otero, el portavoz municipal de Esquerda Unida (EU) de O Grove, aprovechó la reunión del Consello Local de Turismo celebrada el miércoles para proponer una serie de medidas a adoptar en la próxima Festa do Marisco relacionadas con la accesibilidad y la seguridad.

Acompañado de Susana Millán, el edil transmitió al citado órgano consultivo que "una persona con movilidad reducida se encuentra el primer obstáculo nada más llegar a las cajas de venta de tickets, ya que no disponen de una accesibilidad adecuada".

Tras solicitar "que se habilite una caja para facilitar que estas personas puedan adquirirlos" , el líder esquerdista argumentó que ya con los tickets en la mano esas personas "tienen que hacer números para retirar los productos de las cocinas", a causa de la "inaccesibilidad" existente en los soportales del edificio de la plaza de abastos y la lonja. En este caso propone que, "ante la imposibilidad de mejorar este aspecto, se designe a una persona" que se encargue de atender a los comensales con discapacidades.

Esquerda Unida también alerta "de la distancia a la que se encuentran los diferentes servicios a disposición de las personas con movilidad reducida, pues desde las cajas y las mesas existe una gran distancia hasta el puesto de socorro, donde deben solicitar una silla de ruedas en caso de precisarla, o hasta los aseos adaptados que se sitúan tras la lonja".

Los esquerdistas también proponen recuperar la carta de productos escrita en Braille y que se instale un microondas y un cambiador en la sala de lactancia.

En cuanto a la seguridad en la Festa do Marisco, EU reclama que se mantenga el cierre perimetral del recinto que ya se instaló en anteriores ediciones, y que se reclame a otros municipios la cesión de agentes de Policía Local para reforzar la plantilla durante el evento, como hacen villas como Rianxo y A Pobra durante las fiestas de Guadalupe y el Nazareno.