Con las obras de remodelación del Auditorio de O Esteiro prácticamente finalizadas, el alcalde de Vilanova se ha marcado un nuevo objetivo para toda esa zona. Este objetivo no es otro que reordenar por completo todo su entorno que, en estos momentos, se encuentra totalmente abandonado pese a encontrarse en un entorno privilegiado como es la ensenada de O Esteiro.
La intención pasa por crear en ese lugar un espacio destinado a estacionamiento, con capacidad suficiente para las actividades que se puedan generar en el nuevo inmueble. También está previsto crear zonas verdes y de esparcimiento que sirvan para poner en valor la edificación. Por el momento, explica el regidor vilanovés, "es solo una idea en la que estamos trabajando, pero esperamos que para el próximo ejercicio pueda comenzar a realizarse, ya que queremos que toda esa zona sea puesta en valor, sobre todo por el entorno en el que se sitúa".
La gran incógnita es el futuro de las palmeras que se ubican ante lo que será el futuro Auditorio. En un primer momento, se querían trasladar a otro punto de Vilanova, pero el Concello se encontró con un problema en forma de plaga, pues la mayoría de ellas se han visto afectadas por el picudo rojo. La plaga ha acabado con dos de las palmeras, pero el resto están respondiendo bien al tratamiento pero "no vamos a decidir su futuro mientras se encuentren enfermas, porque sería su sentencia de muerte".
Fin de las obras
La finalización de las obras del Auditorio de Vilanova será una realidad el próximo mes de septiembre. El inmueble abrirá sus puertas después de casi cinco años en los que la reconversión de la antigua casa da cultura en Auditorio se encontró con todo tipo de problemas para hacerse realidad. Iniciadas lasa obras antes de las elecciones municipales de 2015, tuvieron que ser paralizadas pocos meses después. El motivo, la aparición de un cable de media tensión que afectaba al ámbito de la obra. Esa suspensión resultó polémica, ya que abrió una brecha en las tormentosas relaciones que mantienen la Diputación y el Concello de Vilanova. Meses de negociaciones y de acusaciones varias finalizaron con la retirada de la empresa concesionaria y con el Concello haciéndose cargo de la dirección de obra. El siguiente problema fue entre la anterior empresa y la Diputación por los acopios. Una vez resuelto, ya todo apuntaba a que el Auditorio se construiría sin problemas, pero la empresa a la que se adjudicó acabar la actuación quebró, por lo que hubo que buscar otra. Finalmente, el Auditorio será una realidad en el mes de septiembre.
