El número de bodas civiles en O Grove no deja de crecer. Y todo porque "cada vez son más las parejas de novios que, atraídos por la belleza de nuestro pueblo, quieren contraer matrimonio aquí". Quien así se pronuncia es el alcalde, José Cacabelos, que precisamente ayer oficiaba otra boda, en este caso protagonizada por dos grovenses, Andrea y Rafael.

Fue en la finca La Atlántida, uno de los lugares preferidos por los contrayentes. "En nuestro local celebramos unas 30 ceremonias civiles al año; la inmensa mayoría de vecinos de otros municipios de la comarca, pero también de Santiago, Vigo, Barcelona, Madrid e incluso Suiza y Reino Unido", explican en este lugar en el pasado usado como residencia de verano del expresidente Adolfo Suárez que ahora funciona como restaurante, con vistas al océano Atlántico y A Lanzada.