La denuncia de Meaño Independiente contra la elección de representante en la Mancomunidade puede provocar que se aplace, al menos, hasta septiembre, la celebración del pleno de toma de posesión. Eso es lo que están analizando los técnicos del ente comarcal, los cuales consideran que, al existir una denuncia judicial, debería aplicarse una suspensión cautelar al proceso de configuración del plenario hasta que esta se resuelva. El todavía presidente, Gonzalo Durán, ha encargado un informe por escrito a los técnicos para entregárselo a los integrantes de la Mancomunidade. No en vano, su obligación es convocar la sesión plenaria para antes del próximo jueves, aunque todo apunta a que no va a poder hacerlo.
Los independientes de Meaño reclaman que se repita la votación de los representantes del municipio en la entidad comarcal y que se haga a mano alzada y no en urna, como ocurrió el pasado mes de julio. Es por ello que presentaron un recurso contencioso administrativo en el que, además, se solicita la suspensión cautelar de los representantes de Meaño en el ente supramunicipal. Esa decisión no será efectiva hasta el mes de septiembre, ya que el de agosto es inhábil en el ámbito judicial.
Los motivos que han llevado a los independientes a presentar esa denuncia se fundamentan en que tanto los conservadores de Carlos Vieitez como los socialistas "han engañado a los vecinos, al no hacer público el pacto que han alcanzado" y por el que la formación del puño y la rosa permite al regidor tener dedicación exclusiva, mientras el PSOE se hace con un representante en la Mancomunidade con dos votos del PP, que respaldaron la candidatura de Manuel Radío y no presentaron ninguna. Para el líder de la formación independiente, José Manuel Aspérez, está claro que ambas formaciones tenían un acuerdo desde hace tiempo ya que los socialistas, a los que llegó a ofrecer la Alcaldía, ni tan siquiera quisieron negociar con MI.
Ese supuesto pacto también le ha costado al alcalde de Meaño serios problemas en el seno de su partido. El primero el descomunal enfado del todavía presidente de la Mancomunidade, Gonzalo Durán, que no dudó en tildar a Vieitez de "traidor" después de haber ejercido como su gran padrino en su debú en la política municipal.
El segundo problema puede acabar en su expulsión del Partido Popular, ya que la formación le ha abierto un expediente que se encuentra siendo analizado por el Comité de garantías del Partido Popular en Madrid. Aunque la decisión todavía no se ha tomado, todo apunta a que finalizará con Vieitez fuera de la formación conservadora, a la que no le va a temblar el pulso pese a que las alcaldías no le sobran precisamente, y más en O Salnés, donde tan solo conserva la de Vilanova.
Mientras todo esto ocurre, el PSOE se encuentra a la espera ya que, por primera vez en treinta años, tiene opciones firmes de gobernar en la Mancomunidade. La formación todavía no ha dado a conocer quien será su candidato, pero tiene hasta cinco alternativas para ello. José Antonio Cacabelos, regidor de O Grove, o Marta Giráldez, alcaldesa de Meis, se perfilan como las principales posibilidades, aunque también están Carlos Iglesias (A Illa), Alberto Varela (Vilagarcía) y Fátima Abal (Cambados).
