El punto de atención continuada, PAC, de San Roque, que atiende las urgencias de primaria de toda la población de Vilagarcía de Arousa, Vilanova y Catoira, volvió a quedarse durante la noche del jueves con un solo médico de guardia, en lugar de los dos establecidos en función del número de usuarios. Uno de los profesionales que había sido destinado para esta guardia sanitaria fue derivado en el último momento para el centro de salud de O Grove, que se quedó sin facultativo por indisposición del titular.

Tanto los profesionales como los usuarios del servicio expresan su malestar por la situación, ya que no se trata de un caso puntual, sino que ha estado ocurriendo en numerosas ocasiones durante el mes pasado. El problema se agrava en el caso de que se presente una emergencia que exija desplazamiento del personal sanitario, ya que el servicio de urgencias queda solo con el trabajador de servicios generales, PSX, que recibe a los pacientes.

El PAC de Vilagarcía padece problemas de saturación de pacientes, ya que al aumento de la población que se registra durante la época estival, se suma el hecho de que muchos usuarios optan por acudir a este servicio tras solicitar cita en su médico y comprobar que tienen una espera de al menos una semana para la consulta.

El problema no se produce solo en Vilagarcía, ya que el PAC de Baltar, en el municipio de Sanxenxo también se quedó sin médico y la solución adoptada por la gerencia del área sanitaria Pontevedra O Salnés fue enviar a uno de los dos profesionales destinados en el punto de atención continuada de A Parda, en Pontevedra.

Como se trata de un problema que se reitera durante toda la época estival, varios trabajadores afectados han escrito a la Junta de Personal para informar de lo que está aconteciendo. Advierten que parece será así el resto de verano, con la obligatoriedad para realizar guardias, incluso en el único fin de semana libre del mes del trabajador. Los profesionales instan a la Junta de Personal a tomar cartas en el asunto.