La Festa do Albariño de Cambados se suma a los eventos que fijan un horario sin ruidos ni música en las atracciones de feria, para facilitar la asistencia de los niños con trastornos del espectro autista. La propuesta, según el concejal de Servicios Sociales, Constantino Cordal consiste en "que las personas con autismo también puedan disfrutar de unas fiestas respetuosas con ellos al contar con una hora sin música". La franja horaria en la que cesará el volumen de los altavoces es la de las 18.00 a 19.00 horas de cada uno de los cinco días de fiestas.

El objetivo de esta iniciativa es la de promover la inclusión social de las personas con TEA (Trastorno del Espectro del Autismo). Los afectados por esta enfermedad sufren una hipersensibilidad auditiva y los expertos explican que aquellos que la sufren acusan mucho los espacios en los que la música o cualquier otro ruido se eleva demasiado. En estos casos los jóvenes no pueden disfrutar de la fiesta, situación que el Concello de Cambados no quiere que se produzca y apuesta por la igualdad y la solidaridad.

Ayudas económicas

Otra de las principales actuaciones que ofrece esta Festa do Albariño en materia de apoyos sociales es la de la creación de unos "tiques solidarios" para los usuarios de los servicios sociales. Esta medida, que ya se había impulsado en otras ediciones, consiste en la entrega de unas entradas para las atracciones para las familias con menos recursos económicos.

La Concellería de Servicios Sociales es la encargada de entregar estos pases de manera totalmente confidencial y privado, garantizando que lleguen a las manos de aquellos que realmente lo necesitan y evitando que haya ningún tipo de distinción entre los niños que acuden a la fiesta. Las entradas son, principalmente, para permitir el acceso a norias y carruseles y los encargados de repartirlas serán, directamente, los técnicos municipales del área de Servicios Sociales.

En total, según los estudios y cifras que maneja el gobierno local, en Cambados hay cerca de 70 menores que pertenecen a familias desfavorecidas, por lo que el Concello quiere alegrarles las fiestas regalándole unas entradas que, de otra forma, no se podrían permitir. El precio, que de media ronda los tres euros por cada viaje en atracción, puede llegar a ser totalmente prohibitivo para algunas de estas familias.

Estas medidas, sumada a la del "Punto Morado" para proteger a las mujeres, confirman que la Festa do Albariño son un lugar en el que se pretende que todos los públicos puedan disfrutar, y comprometido con la igualdad social.