Bajo mínimos desde la llegada del verano. Así se encuentra el ambulatorio de San Roque, en Vilagarcía, donde los usuarios que acuden hasta allí se han encontrado con un grave problema de ausencia de médicos y enfermeros, todo ello porque el Sergas no está cubriendo las vacaciones y los descansos del personal. Esta circunstancia afecta, en primer lugar, a los médicos que están trabajando, que se encuentran con una cantidad de pacientes espectacular, y después, a los usuarios, que no se encuentran con que sus citas se retrasan todavía más de lo habitual por lo que recurren al Punto de Atención Continuada (PAC) o a las urgencias, colapsando estas, que deberían estar para casos más graves.
La situación se ha convertido a en insostenible, pero desde la Consellería parecen no darle la importancia que tiene, al no encontrar sustitutos que puedan atender las consultas y liberar a los médicos de tanta carga de trabajo.
El problema no se circunscribe al ambulatorio, sino que también se extiende al PAC, donde los usuarios del centro se han encontrado con que los servicios se están desarrollando con un número menor del establecido para los médicos. Pese a las quejas que se están registrando, esta situación se ha repetido en varias ocasiones en los últimos días. Es más, tanto usuarios como trabajadores que fue una circunstancia similar, la ausencia de un médico en el PAC, lo que el pasado año acabó provocando el fallecimiento de una persona en A Estrada. Insisten los representantes de los médicos que la situación que se vive en los PAC de la comarca de O Salnés supone "un gran desgaste para el personal y un riesgo para la población que no recibe la atención merecida", explican.
El mismo problema, el de la ausencia de sustituciones, se extiende al resto de centros de salud de la comarca, donde son los propios médicos los que tienen que hacerse cargo de los pacientes de su compañero mientras este está de vacaciones o de baja laboral.
Los problemas en el ambulatorio de San Roque se unen a todos los que se han experimentado en la comarca en los últimos tiempos, donde las críticas al Sergas y a la Consellería de Sanidade han llegado, prácticamente, desde todos los municipios. De hecho, en Cambados llevan meses alertando del cierre del centro en horario de tarde. Tampoco ha quedado excluido de esas críticas el Hospital de O Salnés, donde, como cada verano, vuelven a cerrarse camas, algo que los colectivos de usuarios del centro vienen denunciando sin que la Consellería cambie de parecer, pese al hecho de que la población de la comarca se triplica.
Otro punto donde ha existido una importante fricción fue con el pediatra de A Illa de Arousa. En aquel conflicto, la Consellería estuvo bastante lenta de reflejos, ya que la baja médica del pediatra que da servicio a A Illa y Ribadumia tardó bastante en cubrirse, y cuando se hizo, fue a través de un contrato de un mes, algo que provocó airadas protestas en el municipio. Esas protestas acabaron obligando al Sergas a contratar un pediatra, que al igual que el que se encuentra de baja, comparte los consultorios de A Illa y Ribadumia.
