El Colectivo Ecoloxista do Salnés (CES) manifiesta públicamente su oposición al vertido del dragado del río Lérez en las inmediaciones de la isla de Sálvora, sumándose así a las voces del sector pesquero y marisquero arousano, otras asociaciones ecologistas y partidos políticos contrarios al depósito de lodos en la bocana de la ría.
La presidenta del CES, Marta Lois, echa en falta que se pronuncie la Consellería de Medio Ambiente, a la que solicitará por escrito que deniegue el vertido "en este punto de nuestro mar, así como en otros y aporte una solución alternativa, como puede ser su uso o confinamiento en tierra, ateniéndose a la legislación de residuos".
La asociación ecologista considera imprescindible que se analicen los sedimentos resultantes de la draga del Lérez para determinar su grado de peligrosidad. Explica el colectivo que se clasifican en tres niveles y que Portos de Galicia "debería informar a la población de cuál es la clasificación de estos materiales y cuáles son los riesgos ambientales". Esto en el caso de que ya se hayan analizado. Y si no lo hizo todavía, "es una irresponsabilidad anunciar el vertido en el mar sin saber su grado de toxicidad".
Para Ecoloxistas do Salnés resulta "inquietante" que el estudio realizado por Portos sobre la zona de vertido de Sálvora en 2016, "en su apartado de estudio de la dispersión de los sedimentos vertidos, escogen para hacer su modelo predictivo los sedimentos de la desembocadura del Lérez por su tamaño de grano (el 90% fango y el 10% arena), ya que como citan supone el caso más desfavorable en cuando a dispersión y turbidez en las aguas".
