En O Grove el escrutinio se prevé tenso y largo. Esta mañana aparecieron decenas de papeletas marcadas en al menos dos mesas electorales situadas en el colegio Rosalía de Castro. Pertenecen al PSOE, y alguien se encargó de escribir en ellas frases de mal gusto e insultos, además de dedicarse a tachar los nombres de algún candidato.

Esas papeletas manipuladas fueron introducidas en las cabinas de votación utilizadas para garantizar el voto secreto. Cuando el PSOE se dio cuenta de lo ocurrido, a eso de las doce del mediodía, el propio José Cacabelos, su candidato a la reelección, pidió que se interrumpiera la votación en la mesa afectada para que se retiraran las papeletas marcadas, colocando en su sitio otras impolutas.

Lo que sucede es que un par de horas después se comprobó que ocurría lo mismo en otra mesa, por lo que no se sabe cuántas de las saboteadas acabaron dentro de las urnas, ya que muchos votantes pueden no haberse dado cuenta de lo que sucedía al cogerlas en la cabina para introducirlas en los sobres, y al estar marcadas pueden ser consideradas nulas.Reclamación en curso

El PSOE ya presentó la correspondiente reclamación y la Policía Local levantó acta. Los hechos fueron comunicados inmediatamente a la junta electoral, que al parecer deja la decisión final sobre la validez o no de los votos que puedan estar marcados en manos de los presidentes de mesa. Finalmente podría asumirse que se trata de un sabotaje y esos sufragios podrían darse por válidos. Si no es así, los socialistas estudian recurrir el proceso en su totalidad, por lo que podría repetirse la votación en las mesas afectadas.