Al repasar las actuaciones impulsadas en materia de seguridad vial y priorización de los peatones frente a los vehículos, el alcalde de O Grove, José Cacabelos Rico, recordaba ayer que tras su llegada al poder "sacamos los semáforos de las avenidas Xoán XXII y Teniente Domínguez porque lo que queríamos implantar era un nuevo modelo y aumentar la seguridad con bandas reductoras de velocidad o badenes". Pues bien, "ya se instalaron muchos, y la semana que viene empezarán a colocarse los de Carretera do Conde, que es uno de los tramos más complicados".

Y no es la única novedad, prevista ya que "la calle que baja desde la carretera, cerca del restaurante Culler de Pau, hacia la playa de Mexilloeira, va a ser de sentido único, de bajada, porque es un vial muy estrecho donde se generan conflictos de tráfico permanentes".

"En breve"

Además de apostar por esta medida, convencido de que "va a resolver el problema", incide en que "en breve comenzará la peatonalización de Luis Seoane, ya que esta calle ya tiene ahora el alivio que genera el doble sentido implantado en Beiramar".

Éstas, y alguna más, son decisiones "que hemos tomado en base al proyecto de pueblo que desde 2015 estamos diseñando", insiste José Cacabelos.

Se trata, sentencia, "de que los coches circulen por las mejores vías que tenemos y no por calles estrechas y peligrosas tanto para los peatones como para los propios conductores.